Las garrapatas son un grupo de ectoparásitos (se les denomina “ecto” ya que se localizan en el exterior del animal), los cuales se alimentan de sangre.

Pueden alimentarse de muchas especies animales, resistir diversos climas, condiciones adversas y adaptarse a diferentes situaciones medioambientales. Dependiendo del clima, el ciclo completo puede durar en promedio en dos meses, por lo que en climas cálidos (el cual favorece más a estos parásitos) pueden reproducirse más rápidamente e inclusive varias generaciones afectar al mismo animal.

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Los cuatro estadíos de las garrapatas son diferenciables por el tamaño, por este motivo, las “ninfas” que son muy pequeñas, pueden pasar desapercibidas. La distribución geográfica es prácticamente en todo el territorio nacional, con excepción de algunas zonas de mayor altitud.

Enfermedades que transmiten las garrapatas a las mascotas

Entre los agentes infecciosos que transmiten encontramos:

  • Ehrlichia canis (Ehrlichiosis)
  • Babesia canis (Babesiosis)
  • Rickettsia ricketsii
  • Rickettsia conorii
  • Hepatozoon canis
  • Haemobartonella canis

Las anteriores, son enfermedades prevenibles, es decir, se pueden evitar por lo que es conveniente proteger a las mascotas de las garrapatas en lugar de tratar estas enfermedades cuando aparezcan, ya que muchas de ellas pueden ser mortales si no se detectan a tiempo.

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Es importante mencionar que algunas de estas enfermedades tienen potencial zoonótico, es decir, pueden transmitirse a los humanos, ya que las garrapatas pueden alimentarse de las personas.

El contacto con mascotas que tienen garrapatas facilita la transmisión de estos agentes a las personas. Incluso, en las personas se han detectado infecciones asintomáticas, es decir, la persona no se da cuenta que tiene la infección, como en algunos reportes de casos humanos de Ehrlichia sp., dependiendo de la especie del parásito que afecta al perro.

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Las Ehrlichias sp son del grupo de las rickettsias, bacterias gramnegativas, que viven al interior de las células, tienen afinidad por las células sanguíneas, como los leucocitos y las plaquetas. La Ehrlichiosis humana, que es causada por variedades de Ehrlichia, es una enfermedad febril aguda transmitida por la mordedura de garrapatas procedentes de animales enfermos o portadores, como perros, gatos, ganado vacuno o bovino y caballos.

Cómo prevenir y controlar las garrapatas en las mascotas

El control de ectoparásitos, pulgas y garrapatas, debe realizarse en forma preventiva durante todo el año con los siguientes consejos:

  • Uso de collares, aerosoles o pipetas con garrapaticidas de acción prolongada, de acuerdo a la recomendación del fabricante. Hay que evitar el uso de una misma marca por tiempo prolongado ya que puede generar resistencia en las garrapatas, para esto debe cambiar de marca (principio activo) por lo menos cada 3 a 4 meses.
  • Se puede usar un champú que combata los parásitos, esta es una buena estrategia preventiva para mantener al perro o gato libre de garrapatas.
  • Todos los productos vienen para dosificar según el peso del animal. Prácticas tales como dividir las dosis (por ejemplo una pipeta para un canino de 50 kilos dividirla y aplicar la mitad en dos perros de 25 kilos) lo único que genera es resistencia en las garrapatas y aumenta el riesgo de transmisión de las enfermedades al no producir el efecto deseado, en resumen, estas prácticas no protegen adecuadamente los animales y finalmente se desperdicia el producto.
  • Existen en el mercado una amplia diversidad de productos y marcas que se administran de manera tópica u oral. No existen vacunas contra las garrapatas en mascotas.
  • La ivermectina no está constituida como una estrategia de prevención y control adecuada para las mascotas, ya que no evita la transmisión de agentes como Ehrlichia sp.
  • Evite prácticas como reenvasar los productos o las pipetas en jeringas u otros dispositivos, en general todos los productos vienen para administrar de una sola vez y una sola dosis.

Síntomas de que la mascota sufre de garrapatas

Pueden haber signos y síntomas tales como anorexia (el animal deja de comer, hay inapetencia), depresión, fiebre, petequias (pequeños puntos de sangre que pueden aparecer en la piel en zonas como el abdomen), anemia y trombocitopenia (disminución en el número de plaquetas), entre otros.

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El diagnóstico se debe realizar según la historia clínica, los antecedentes de haber viajado a alguna zona de clima cálido o donde exista la presencia de garrapatas, por lo que se necesita confirmarse teniendo en cuenta una combinación de signos clínicos, anormalidades hematológicas, trombocitopenia y hallazgos serológicos.

La presencia de los agentes de enfermedad se puede confirmar mediante diversas pruebas de laboratorio, sin embargo, es importante realizar exámenes de control o preventivos si se sospecha de alguna enfermedad o si se ha detectado en el animal la presencia de por lo menos una garrapata.

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Algunos perros manifiestan signos inespecíficos tales como sangrado nasal leve, presencia de gotas de sangre en la orina, en las heces, en la piel, fiebre ocasional, letargia o decaimiento, por este motivo cualquier canino que manifieste alguno de los signos o síntomas descritos anteriormente, debe ser llevado al médico veterinario para que realice una evaluación completa y las pruebas de laboratorio necesarias para confirmar o descartar la presencia de alguno de estos agentes.

Tratamientos contra las garrapatas y recomendaciones

El médico veterinario decidirá, según el diagnóstico, la enfermedad que tiene su mascota. Por esto es fundamental hacer exámenes de control cuando se encuentren garrapatas en el animal. De igual manera, cada una de las enfermedades que transmiten las garrapatas tienen tratamientos diferentes y tratamientos de soporte (para tratar la anemia, la disminución de plaquetas, hidratación, disminuir o evitar la fiebre, etc).

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Recuerde, siempre que sospeche alguna anormalidad en su mascota, debe consultar con un médico veterinario acreditado con título y matrícula profesional, No ponga en riesgo la salud de su mascota en manos de terceras personas, pues el profesional es el único que puede detectar cualquier enfermedad y ordenar el tratamiento adecuado para su mascota.

Las garrapatas se reproducen por miles, es por esto que si usted nota que su mascota tiene una, dos o varias garrapatas, es posible que en la casa, el piso, la alfombra, la cama de la mascota, más, haya un gran número de garrapatas; el control debe hacerse con productos de larga acción.

No se debe quitar las garrapatas manualmente, ya que si no realiza bien este procedimiento, puede quedar una pequeña herida en la piel de su mascota e infectarse.

Si su mascota pasa la mayor parte del día en un jardín o terreno amplio claramente necesitará de más atención de su parte pues estará más propenso a la aparición de garrapatas, en este aspecto es muy importante revisarlo al menos una vez a la semana para asegurarnos que está libre de estos parásitos.

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