En todo el mundo, los cumpleaños se celebran de diversas maneras, frecuentemente reuniendo a familiares y amigos en bares o restaurantes. Estos lugares a menudo obsequian a los clientes con algún tipo de postre para celebrar la ocasión.
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El incidente ocurrió cuando la empresaria Gessica Geca llevó a su abuela a un restaurante en el sur de Arezzo para festejar su cumpleaños. Geca había consultado previamente si podía llevar su propia torta para que la abuela soplara las velas.
Después de disfrutar de una comida, se sorprendió al recibir una cuenta de 659 euros, que incluía la tarifa de 58 euros por el servicio de cortar y servir la torta. Este cargo superó el costo de la propia torta, que fue de 48 euros, según informó el medio Corriere Fiorentino.
Geca afirmó que se le explicó que este cobro era una norma del restaurante y que no había alternativa. Ella publicó la factura en Facebook, generando una gran cantidad de comentarios. Geca comentó que consideraba el monto excesivo para el servicio recibido y que su abuela, quien insistió en pagar, fue quien atendió la cuenta.
Añadió que un empleado del restaurante le informó que era habitual cobrar por este tipo de servicio, pero ella opinó que era una exageración. Por su parte, el dueño del restaurante, que prefirió no revelar su nombre, explicó que no cobra tarifas adicionales cuando sirve sus propios platos.
Argumentó que la tarifa servía para cubrir los costos de personal y servicios asociados. Sin embargo, reconoció que, de haber estado presente durante el incidente, habría ofrecido un descuento a la cumpleañera para evitar malentendidos y asegurar una experiencia positiva.
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