Claire, una de sus familiares, aseguró a 3AW que ella empezó a sentir mareo e inflamación en la garganta una hora después de haber comido una porción del pastel. Además, al paso de otras 2 horas, ella y 4 miembros de la familia  (incluidos sus padres, de 80 años) fueron hospitalizados.

La mujer añadió que todas las víctimas del joven bromista fueron tratadas por sobredosis. Sus papás, por ejemplo, experimentaron vómitos y una frecuencia cardíaca alta. Ella, por su parte, tuvo efectos secundarios “graves” durante 3 días debido a una reacción alérgica al cannabis.

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La australiana manifestó al mismo medio que al principio todos se sintieron “aterrorizados” porque durante varias horas nadie (ni siquiera los médicos) sabían lo que ocurría. “La gente se estaba desmayando y el personal del hospital estaba frustrado porque todos habábamos sin sentido”, agregó.

Al final, el bromista confesó lo que había hecho e indicó que obtuvo el chocolate gracias “a un amigo que lo consigue en Estados Unidos”. A pesar de lo que hizo, su familia no llamó a la policía, concluyó 3AW.