La mujer, que prefirió permanecer en anonimato, aseguró a Daily Mail que los invitados hicieron que el techo del comedor se desplomara, por lo que varios de sus muebles quedaron inservibles.
Ella añadió que también encontró su cama y su televisor hechos trizas. Además, cuando llegó a su hogar, vio a varios jóvenes en el baño consumiendo éxtasis.
La anonadada madre indicó al diario inglés que hasta hace poco su hija había estado viviendo donde su abuela y que no sabía que iba a hacer una fiesta en su casa. La mujer se expresó aliviada de que la vivienda fuera suya, ya que si estuviera en arriendo ya la habrían desalojado.
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Chris Sellors, uno de los vecinos, señaló al medio que la fiesta empezó hacia las 4 de la tarde del pasado sábado (17 de noviembre) y que “toda la calle estaba llena de adolescentes”. Aunque el hombre afirmó que varios de ellos le lanzaron botellas de vidrio a la policía, la madre de la quinceañera negó que eso haya ocurrido.
De acuerdo con el testimonio de otra vecina, identificada como Aimee Pankhurst, la fiesta se terminó hacia las 10:15 de la noche.
Daily Mail no especificó si la madre de la menor castigó de alguna manera a su hija.
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