Dicho ministro describe una serie de nuevas normas, como la obligación de los operadores de telecomunicaciones de usar “inteligencia artificial y otros medios técnicos” para verificar la identidad de las personas que registran un nuevo número de teléfono.
Un representante de servicio de clientela de China Unicom dijo a la agencia AFP que en la práctica el requisito significa que los clientes que registran un nuevo número tienen que grabarse a sí mismos.
La medida llega en un contexto de auge de los sistemas de reconocimiento facial en China por parte de las autoridades.
El reconocimiento facial ha generado preocupaciones relacionadas con la privacidad, informa el diario británico The Guardian, y pone el ejemplo de una universidad en la que se instalaron cámaras para reconocer a los estudiantes.
Ese hecho ofuscó a los padres de familia, dice el medio, porque las capturas de los rostros de los alumnos se habían hecho sin su consentimiento.
El medio cita a defensores de los derechos humanos, quienes expresan que este es un primer paso de China para convertirse en un “estado de vigilancia distópico”, algo similar al ‘gran hermano’ del que hablaba el autor George Orwell en su novela ‘1984’.
Por su parte, BBC reportó un comentario del bloguero del sitio Sina Weibo: “La población es cada vez más monitoreada de forma estricta. ¿De qué tendrá miedo el gobierno?”.
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