La alemana Rebecca Marlene Sprober regresó al país este año luego de que el gobierno de Gustavo Petro la volviera a admitir. La extranjera había sido expulsada en julio de 2021 por participar en las protestas de la ‘primera línea’ en Cali mientras poseía una condición de turista.

(Vea también: “Son líderes comunitarios”: minjusticia defendió a los “gestores de paz” de primera línea)

Fue en noviembre de 2022 cuando Migración Colombia emitió una resolución en la que revocó la expulsión de Sprober ya que consideraron que no existía ninguna afectación de interés público o social. Incluso, hace unas semanas fue vista en Cali durante un acto de honor a los periodistas del departamento.

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Ahora, las críticas giran alrededor del esquema de seguridad que le fue designado por la Unidad Nacional de Protección (UNP) cuando hay líderes sociales que están amenazados y no cuentan con ningún tipo de protección.

La UNP explicó que se le brindó un esquema por riesgo “inminente” y que la alemana se encuentra en el país cerrando un duelo y visitando a la familia de Johan Sebastián Bonilla, su pareja que murió baleada cuando sufrieron de un atentado al norte de Cali.

“Por el riesgo inminente, mediante trámite de emergencia, la UNP le implementó medidas provisionales de emergencia mientras indaga ante las autoridades y se esclarece la verdad de los hechos que la afectaron a ella y a su pareja”, indica el comunicado.

 

La entidad señaló que Sprober también tiene deberes: “Abstenerse de asumir conductas que puedan poner en peligro su seguridad” y “mantener la reserva y confidencialidad de la información relacionada con sus situación particular”.

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