Las catastróficas cifras de muertos y heridos por el terremoto que devastó el sur de Turquía y el norte de Siria, y que ya superarían los 5.000 fallecidos, tienen al mundo estremecido y con los nervios de punta.

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Por eso, las informaciones sobre cualquier temblor en cualquier parte del planeta están entre las prioridades de las personas, entre otras razones porque los movimientos telúricos se presentan acompañados de otros.

En Colombia, por ejemplo, este lunes por la noche, el Servicio Geológico estableció que se presentó un temblor con magnitud de 3,7 grados en la escala de Richter, y que tuvo epicentro en el municipio de Pasca (Cundinamarca), a una profundidad de 30 kilómetros.

Con esa sensación se fueron a dormir los habitantes del centro del país, siempre teniendo presentes las conmovedoras imágenes de los estragos que causó el terremoto en Turquía y Siria.

Pero en la madrugada de este martes 7 de febrero, apenas ocho horas y unos cuantos minutos después, el Servicio Geológico Colombiano volvió a informar sobre un temblor en Colombia, aunque ya no en el centro del país.

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El nuevo evento sísmico se produjo a las 4:27 de la madrugada, con epicentro en el municipio de La Mesa de los Santos (Santander), en donde es habitual que se produzcan estos movimientos.

De acuerdo con el Servicio Geológico Colombiano, la magnitud del temblor fue de 3,7 en la escala de Richter a una profundidad de 146 kilómetros.