Los profesionales, identificados como Arturo Niño Rincón y Gabriel Tadeo López, eran contratistas y realizaban estudios en Las Mercedes, una zona rural del municipio de Sardinata en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela y donde operan la guerrilla del Eln y también bandas criminales, según un comunicado de la Policía.

La última comunicación con uno de los ingenieros fue el sábado y el reporte de la desaparición se conoció el lunes por la tarde, apuntó el texto.

El comandante regional de la Policía, Gustavo Moreno, dijo a periodistas que las autoridades tienen “indicios importantes” de que el grupo armado Los Pelusos “puede tener algún tipo de responsabilidad” en este caso.

Los Pelusos, igual que algunas estructuras del Eln, luchan y hacen presión sobre la comunidad para que impidan la construcción de instalaciones policiales”,

detalló Moreno.

La Policía de Norte de Santander añadió en el comunicado que ha desplegado, junto a otras autoridades de la región, todas las “acciones investigativas y operativas” para lograr el retorno de los ingenieros “al seno de sus familias en el menor tiempo posible”, al tiempo que rechazó la “retención arbitraria” de Rincón y López.

Colombia vive un conflicto armado de más de medio siglo en el que han participado guerrillas, paramilitares y fuerzas del Estado.

Con la firma de la paz en noviembre con las Farc, el Eln, que ha usado la retención de personas como método de financiación, es el único grupo rebelde, con el que este martes el gobierno prevé lanzar negociaciones de paz en Quito.

Las milicias irregulares de extrema derecha, nacidas en los años 1980 para combatir a las guerrillas, se desmovilizaron hace una década a instancias del gobierno, pero disidentes de esos grupos formaron bandas criminales, llamadas “bacrim” por las autoridades y conocidas también por realizar secuestros extorsivos.

Con AFP