El estallido de la pólvora, que causa afectaciones cardiacas y desorientación en muchos animales, causó la muerte de dos de los animales que habitaban en el zoológico ubicado en el occidente de Cali, detalló Blu Radio.

“Los dos murieron el mismo día luego de la pólvora que se quemó el 25 de diciembre. El equipo veterinario empezó el proceso de necropsia que es muy detallado en el que se revisa todo el organismo del animal. El diagnóstico lo que detectó fue miopatía, una patología que es causada por el estrés agudo y prolongado que genera cambios en su organismo como deficiencia de oxígeno”, detalló a esa emisora Susan Posada, coordinadora de comunicaciones del zoológico de Cali. (Vea tambiénQuiénes son los dueños de El vaquero, la empresa que más vende pólvora en Colombia).

Posada agregó que la preocupación se mantiene ya que queda una semana de fiestas y el uso de la pólvora parece no tener ninguna regulación en la capital del Valle del Cauca.

“La familia de antílopes había llegado recientemente y los chigüiros ya llevan muchos años acá. Nos preocupa mucho que dentro de nuestra población hay muchos herbívoros como las cebras, pues en este momento tenemos dos crías y es muy complicado mitigar; no podemos ponerle una urna de cristal al zoológico para evitar que ellos escuchen las detonaciones”, añadió en esa cadena radial.

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Pero la situación no solo es compleja para los animales del zoológico, sino también para las mascotas de toda la capital vallecaucana, donde la llegada de la feria ha disparado el uso de la pólvora.

Varios grupos animalistas de Cali, citados por esa emisora, señalan que en la ciudad se han perdido unas 1.500 mascotas por culpa de la quema de pólvora que los aturde y desorienta.

Ante esto, los grupos animalistas hacen un llamado para limitar el uso de la pólvora y cuidar a las mascotas para que no estén expuestas ante los estruendos que abundan en esta época de fin de año.

¿Cómo evito que mi mascota se asuste con la pólvora?

Laura Tafur, médica veterinaria, habló con Pulzo y comentó que lo ideal es hacer un espacio de calma, donde se pueda aislar el ruido con cajas de huevos o espuma en las paredes del lugar. Además de usar olores en aceites, como lavanda. También se pueden conseguir feromonas en un difusor y utilizarlas antes.

“Lo más importante es no dejar que ese miedo se convierta en fobia y para esto es bueno visitar a un especialista, que en este caso es un médico veterinario etólogo. Es bueno acompañarlos en ese lugar de calma si es posible y tener mucho cuidado con ventanas cercanas, balcones y terrazas”, dijo la médica veterinaria.