El cambio de más alto rango será el del mayor general Carlos Ernesto Rodríguez Cortés, quien fue designado como inspector general. Rodríguez se desempeñaba como director de Seguridad Ciudadana, detalló la Policía Nacional.

De igual forma, el mayor general Herman Alejandro Bustamante Jiménez pasara de la Dirección de Antinarcóticos a la Dirección de Seguridad Ciudadana, añadió esa entidad. (Vea también: Las ideas del Gobierno para enfrentar la ola de inseguridad desatada que vive Colombia).

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Las autoridades manifestaron que el brigadier general Ricardo Augusto Alarcón Campos será el nuevo director de Antinarcóticos de la Institución. Alarcón dejará el cargo que tenía como comandante de la Región de Policía N.°4, ahora bajo el mando del brigadier general Pablo Ferney Ruiz Garzón.

La comandancia de la Policía en Barranquilla también tendrá una reforma. El brigadier general Luis Carlos Hernández Aldana fue designado como comandante de la Policía Metropolitana de la capital del Atlántico.

El cambio en la dirección de seguridad ciudadana de la Policía se da en medio de una ola de delincuencia desatada que afecta a las principales ciudades del país.

En Bogotá, por ejemplo, la situación es crónica y ha llevado a que zonas históricamente catalogadas como seguras ahora sean intransitables por la delincuencia.

Es el caso de Chicó Lago, en el norte de Bogotá, donde se ha establecido un incremento de la delincuencia que rebasa la capacidad de control por parte de las autoridades.

“Mientras que Suba tiene 780 policías, yo tengo 350. Hay un tema especial, el 40 % de los registros de la Cámara de Comercio de Bogotá están en Chapinero. Tenemos 36 universidades, 524 restaurantes, 185 bancos y 200 cajeros que cuidar”, señaló el coronel Édgar Ávila, comandante de la estación de Policía de Chapinero, acerca del incremento de la delincuencia en ese sector.

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