La elección a la Contraloría ha estado cargada de todo tipo de polémicas. A la lista se suma el apoyo de los partidos tradicionales a la cuestionada abogada María Fernanda Rangel, que ahora es la favorita a quedarse con el puesto, a pesar de no ser apoyada por el Pacto Histórico. El partido de gobierno concretó alianzas para obtener mayorías en el Congreso, pero se le voltearon y parecen estar perdiendo la pelea por el cargo disputado.

Los partidos Liberal, Conservador, la U y Cambio Radical anunciaron ayer en un comunicado sus intenciones de apoyar a la candidata:

Actualmente Rangel está al mando de la Dirección de Información, Análisis y Reacción Inmediata (Diari) de la Contraloría General de la República. Algunos de sus detractores la señalan de ser ficha de su jefe, el actual contralor, Felipe Córdoba. Esto planteó uno de los principales críticos de la aspirante al cargo, el senador Ariel Ávila, que hizo una investigación sobre ella.

Ávila vincula a Rangel con distintos casos de corrupción, como los 500.000 millones de pesos que iban destinados a la paz, y que según Ávila, fueron robados, incidente que la funcionaria habría pasado por alto y no investigó.

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Por otro lado, el senador asegura que el hermano de Rangel está siendo investigado por el escándalo del relleno de Doña Juana. 

Otra controversia de la que ha sido parte la candidata a la Contraloría tiene que ver con su tesis de grado. Rangel tiene una Maestría en Gobierno y Políticas Públicas y estudió Derecho en el Externado, su título de abogada ha sido cuestionado por el Grupo Plagio SOS por no citar contenido de otros autores.

El portal digital, que en colaboración con El Espectador denunció un posible plagio en la tesis de Jennifer Arias, también ha puesto en duda el puntaje de la candidata en la prueba que mide las aptitudes de aspirantes a la Contraloría.