Los petristas ‘pura sangre’ al interior del Pacto Histórico están tanteando el terreno para tratar de que esa coalición se convierta en un partido único que contenga el creciente ruido de división en las fuerzas políticas del presidente Gustavo Petro, que tuvo más eco este martes con la decisión del Partido Liberal de rechazar su reforma a la salud.

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Mientras el Jefe de Estado lidia con esa división de su coalición de gobierno, la senadora María José Pizarro puso a andar al interior del Pacto la idea de que es necesario que los partidos que conforman esta colectividad de izquierda se vuelvan uno solo y cierren filas en torno al proyecto político que lidera Petro.

“Queremos fortalecer el bloque progresista y para ello tendría que darse la fusión de los distintos partidos que conforman el Pacto Histórico, en especial ante la proliferación de personerías jurídicas que hay en el partido: 33 de acuerdo con el Consejo Nacional Electoral (CNE)”, le dijo la senadora a EL COLOMBIANO.

Esta ambiciosa propuesta de Pizarro además tiene como fin que el Pacto se consolide como la única y principal fuerza de izquierda en las elecciones locales de octubre, y en las presidenciales y legislativas de 2026. No obstante, esa no será una tarea fácil por los personalismos y división de poder que imperan al interior de los partidos de izquierda.

Este diario conoció que aunque ese plan está siendo puesto sobre la mesa insistentemente por los alfiles de Petro en cada reunión del Pacto, la idea de ser un solo partido no cuaja del todo en las diferentes fuerzas políticas y en particular en algunas de sus caras más visibles como Roy Barreras, quien ha estado distante del petrismo tras la confirmación del nacimiento de su partido, la Fuerza de la Paz.

Después de que el CNE le otorgó personería jurídica en febrero, Barreras dejó claro que no desaprovechará el poder que ese reconocimiento le otorga para dar avales y recibir financiación del Estado, lo que quedó en evidencia cuando difundió una lista de posibles candidatos a los que les daría aval para las elecciones de octubre, entre ellos Dilian Francisca Toro, la directora de La U.

Precisamente el nombre de Toro desató peleas en el Pacto al provocar críticas de Pizarro y de David Racero, presidente de la Cámara, quienes cuestionaron esa posible alianza. Ese fue un mensaje tácito con el que dejaron claro que el petrismo quiere controlar los avales para elecciones.

“Con Roy Barreras hay discusiones que habrá que dar. Él ha anunciado unos nombres de avales frente a los que nosotros tenemos serias diferencias, pero la Fuerza de la Paz también hace parte del Pacto Histórico”, apuntó Pizarro.

En medio de estas discusiones, sobresalió una voz de apoyo a la idea de Pizarro, se trata del representante a la Cámara por Antioquia, Alejandro Toro, quien pertenece del ‘Independientes’ de Daniel Quintero, movimiento que hace parte del Pacto Histórico.

“Respetando la autonomía que tienen los partidos, creo que debemos dar un paso más allá y consolidemos un gran partido de modo que lo que logramos en las elecciones anteriores se convierta en triunfo en las elecciones regionales y luego en el 2026 con candidaturas y listas más fuertes”, señaló Toro.

Ese rifirrafe, que se mantiene latente, no sería el único palo en la rueda para la creación del mega partido, pues se le suma que colectividades tradicionales de izquierda como el Polo Democrático podrían perder manejo de presupuesto y avales, por lo que la idea no termina de convencer.

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“También se debe dialogar en torno a mecanismos como hacer una consultas de cara a la conformación de las listas para dotar de muchísima más legitimidad al Pacto Histórico y de ir mejorando e institucionalizando fórmulas democráticas”, apuntó Pizarro.

En medio de las rencillas, con este plan el petrismo además planea acabar con la ‘operación avispa’ que tiene que implementar para garantizar que los 10 partidos que conforman el Pacto sí estén alineados con Petro, y buscan tener un control unificado de las decisiones y de las listas de cara a las elecciones.