El aguacero que vivió Ibagué en la mañana del 27 de abril tiene de luto a la ciudad porque un hombre, de 58 años, identificado como Jorge Orlando Castellanos, perdió la vida cuando su vivienda fue arrasada por un alud de tierra en el barrio Combeima, en la ruta que comunica a la plaza de La 14 con el sur de la ciudad.
Del hombre se conoció que vivía junto a su esposa y cinco hijos en el lugar y que se dedicaba al comercio informal.
Según explicaron las autoridades, el material se desprendió producto de la saturación del suelo y terminó por derribar esta vivienda que estaba en zona de riesgo y ya había sido reubicada hace varios años. En Ibagué en la mañana de ayer cayeron 30 milímetros de agua en 40 minutos lo que habría recargado el terreno.
En el lugar, a primera hora, acudieron los organismos de socorro e hicieron presencia varios secretarios de despacho con personal operativo para hacer un diagnóstico de los puntos críticos, la caracterización de los afectados y retirar el material vegetal y lodo que quedó sobre la vía.
“Tuvimos unas lluvias de bastante intensidad y de corta duración, lo que hace que los suelos se saturen de forma muy rápida y se presente un desprendimiento de parte de la ladera que queda al costado posterior de la Clínica Tolima, es así como este alud alcanza a una vivienda, la destruye totalmente y una persona que se encontraba allí fue sepultada”, explicó el secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo, César Gutiérrez.
El funcionario señaló que la capital del Tolima está en época de más lluvias y que en los dos últimos años las precipitaciones en la región Andina han sido demasiado intensas lo que deja mayores situaciones de riesgo.
La secretaria de Salud y alcaldesa encargada, Johana Aranda, señaló que la Secretaría de Ambiente y Gestión del Riesgo se encargará de hacer una caracterización de los afectados así como de brindar un albergue temporal a seis viviendas que estaban cerca de la zona afectada y permanecen en riesgo.
Revisión a zona de riesgo
La secretaria de Planeación, Dora Montaña, señaló que en el área afectada en este sector del barrio Combeima así como en las áreas aledañas se iniciaron visitas técnicas de personal de la Secretaría de Infraestructura y la Corporación Autónoma del Tolima (Cortolima) para evaluar el terreno.
Sin embargo, para esta zona ya existen unos estudios básicos, según el Plan de Ordenamiento Territorial (POT), que establecen que hay una condición de amenaza, por lo que se le insistió a la ciudadanía en no asentarse sobre estos lugares y se habló de procesos previos para la adquisición de estos predios por la CAR y el Municipio.
En el mismo sentido, Montaña indicó que según los antecedentes en el lugar donde ocurrió la tragedia, ya se había adelantado un proceso de reubicación.
“Es la conciencia de cada uno de nosotros no transitar en la zona y reiterar que en la zona específica, donde se dieron las afectaciones, ya se adelantaron procesos de adquisición de predios por parte de la CAR y la Alcaldía municipal, también en esta zona existieron procesos de reubicación de acuerdo con los antecedentes. Tomemos en cuenta las advertencias que hacen técnicos y especialistas para no poner en riesgo la vida”, puntualizó la funcionaria.
Verifican la Clínica Tolima
Teniendo en cuenta que la afectación se registró a un costado de la Clínica Tolima, las autoridades iniciaron un recorrido para evaluar la afectación del centro hospitalario.
La gerente de la Clínica Tolima, Liliana Katerine Escobar, a través de un comunicado sostuvo que con la presencia de las autoridades y organismos de socorro se hizo una inspección de las condiciones del terreno y eventuales riesgos y por ahora se detectó que no existen situaciones de riesgo.
“La infraestructura no está afectada y nos encontramos en buenas condiciones para continuar prestando servicios a todos nuestros usuarios. De esta manera aclaramos la situación actual de la Clínica Tolima brindando seguridad a nuestros pacientes, familiares y público en general que acude a nuestras instalaciones”, dijo la Gerente.
No obstante, el secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo en medio de la emergencia dijo que más allá del concepto técnico se debe hacer un estudio detallado, “una institución como la Clínica Tolima requiere que tenga una infraestructura consolidada y garantista, por lo tanto recomendamos un estudio técnico con profesionales expertos en la materia para que tengamos certeza y tranquilidad”, acotó.
Captación de agua sin problemas
Pese a las fuertes lluvias, el Ibal confirmó que el suministro de agua en la ciudad es normal, al cierre de esta edición se estaba captando el recurso en un 100 % de las bocatomas Cay y Combeima, y un 30 % de la bocatoma Chembe.
Otras emergencias por lluvias
Las fuertes precipitaciones también generaron afectaciones e inundaciones en otros puntos de la ciudad por el taponamiento de los sumideros y colectores de aguas lluvias. En el conjunto residencial Timaka, en el barrio El Salado, el agua inundó el primer piso de varias torres y obligó a los residentes a evacuar sus hogares con algunos enseres para evitar que se dañaran.
“Esta es una torre de apartamentos que se dio a los militares con discapacidad y madres que perdieron sus hijos en combate, se rebosaron las aguas negras y las cajas se taparon”, dijo una de las residentes.
En el mismo sentido, Mayra Lorena Masmela, presidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio Santa Cruz, alertó la falta de intervención en la vereda El Pañuelo que en 1995 generó una emergencia y destruyó varias viviendas en la comuna Dos, “les pedimos a las autoridades pertinentes que ayuden a remover este material de vegetación, lodo y arena para lograr que el agua pueda circular de manera adecuada, el espacio es muy reducido y cuando llueve fuerte es angustiante”, dijo la líder comunal.
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