Los testimonios que han entregado testigos como Laureano Martínez, exmayordomo de la finca Haras de San Fernando, ubicada en Guasca (Cundinamarca), de propiedad del exembajador de Colombia en Uruguay Fernando Sanclemente, llevaron finalmente al exdiplomático a juicio.
Después de su primera declaración en el ente acusador, Martínez volvió a la finca y encontró que “habían quemado [todo], [y] no dieron orden de sacar mis cosas. Había unos computadores y unos celulares. Cuando volvió mi hija, se había quemado todo lo relacionado con la finca […]. Toda la información de presupuestos, gastos, arriendos”.
Esas declaraciones más los hallazgos de los investigadores derivaron en un escrito de acusación que presentó la Fiscalía contra Sanclemente por, presuntamente, haber ordenado la destrucción de varios elementos que contenían información del funcionamiento del laboratorio para el procesamiento de cocaína que fue hallado en su finca, informó CM&.
El ente acusador, en un documento de 8 páginas citado por ese medio, sostiene que, en septiembre del 2020, tras un allanamiento del CTI, Sanclemente “hizo una reunión con los empleados de su finca y les ordenó quemar varios enseres, dos computadores, dos celulares, una caja con cuadernos, una tableta, varias USB y un disco duro”.
Martínez y otro exmayordomo de la finca de Sanclemente están en proceso de colaboración con la justicia y siempre han sostenido que el exembajador “conocía de la actividad ilícita que se desarrollaba en su propiedad”. El exdiplomático ha negado todos los señalamientos.
La audiencia de acusación contra Sanclemente tendrá lugar el primero de julio a las 8:00 de la mañana en el Juzgado 50 Penal del Circuito con Funciones de Conocimiento.
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