Durante la audiencia pública que se adelantó este martes en el complejo judicial de Paloquemao, en el centro de Bogotá, la defensa del acusado solicitó su libertad. En ese sentido, como la acción penal está en cabeza de la Fiscalía, el juez acató la petición de los abogados de Andrade.

La explicación es que “el ente acusador considera que la decisión tomada por el juez de control de garantías, el 04 de diciembre de 2017, ya cumplió su objetivo y los elementos materiales probatorios están a salvo”, bajo custodia, expresó en un comunicado.

Desde ese momento, Andrade permanecía en detención domiciliaria mientras es investigado por la adición al contrato de concesión Ruta del Sol II, exactamente el tramo Ocaña – Gamarra, que se adjudicó con Odebrecht, cuando él estaba al frente de la ANI.

Lo curioso es que esta decisión la toma la Fiscalía, luego de que el pasado martes durante el debate de Odebrecht, el fiscal Néstor Humberto Martínez lo acusara de encabezar una conspiración en su contra para sacarlo del cargo.

Además, en los últimos días el gobierno norteamericano ha hecho presión en el caso de Andrade, pues a través de una carta al presidente Iván Duque, solicitó “especial atención” para él.

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Según la Fiscalía, en su momento se le impuso esa medida para que Andrade “no obstruyera el proceso o manipulara el conjunto de pruebas que tiene la Fiscalía, riesgo que desapareció porque ya fueron descubiertas”.

En el proceso, Andrade debe responder por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos, en calidad de autor; ocultamiento, alteración o destrucción de elementos materiales probatorios, como coautor; y falso testimonio en calidad de determinador.