El relató lo entregó el hombre al diario El Tiempo, donde se identificó como “Carlos”. Contó que desde los 10 años delinque en la capital y reveló que su modalidad es el atraco de “quieto” para atrapar a sus víctimas.

Con ese modus operandi, el delincuente primero analiza a su víctima, que preferiblemente esté distraída; lo embiste en un lugar solitario, lo aprieta del pecho o del cuello y lo intimida con un cuchillo para que entregue las pertenencias de valor.

Antes de asaltar o de cometer cualquier hurto, los ladrones estudian a las personas o la situación de la siguiente manera, según explicó el joven, de 27 años al medio:

  • Identifican cuando las personas llevan portátiles por la forma rectangular o el relieve que se forma en los bolsos.
  • Se concentran en los audífonos que utilizan los ciudadanos para identificar de qué marca es el equipo y si vale la pena arriesgarse a hurtarlo.

“En un tiempo estuvieron de moda los Sony Ericsson. Uno identificaba la capsulita y decía, uy, lo lleva, y entonces, pues pague por perro […]. Se hace con todas las marcas; uno las estudia por internet, no crea que uno no es educado”.

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  • Prefieren atracar a los universitarios porque “dan papaya en cualquier lado”, siempre utilizan celulares de última tecnología y computadores portátiles.
  • Analizan el vestuario de la personas porque les permite identificar su estatus y deducir que tienen objetos de valor.
  • La reacción inmediata de los ciudadanos que se asustan al percatarse de la presencia de un ladrón. Según le explicó el atracador al diario capitalino, muchas personas ponen la mano en la parte en la que guardan los elementos de valor y por eso van al sitio fijo.
  • Buscan los carros que están parqueados en sitios oscuros o solos para robar los lujos de los vehículos como parabrisas, lunas, antenas y espejos.
  • Los trancones son otra ventaja para los ladrones, pues allí ponen en la mira a sus víctimas. “Nosotros hacemos ronda y con solo una mirada detectamos los celulares, el portátil, la cartera, si la señorita tiene joyas o el caballero, un relojito”.
  • En las viviendas, los ladrones por lo general suben al último piso escalando postes. Evalúan las puertas principales para verificar si tienen seguros, y así saber qué objetos pueden sacar por las ventanas u otras salidas.
  • Identifican cajas donde las mujeres siempre guardan las joyas.

Cabe recordar que hace pocos días la Policía mostró unos videos en su cuenta de Twitter, donde dos “delincuentes” (condenados) cuentan cómo evitar un robo en un cajero o por ‘llamada millonaria’.