El pasado 25 de febrero se confirmó el asesinato de la joven Nickol Valentina, de 15 años de edad, quien había sido víctima de un brutal ataque con arma blanca cuando le intentaron robar su celular en el túnel del Mesón de los Búcaros, en Bucaramanga.

El homicidio se dio a manos de Pedro José Trujillo, quien el domingo aceptó ante las autoridades que sí fue quien le quitó la vida a la adolescente. 

Al enterarse de que Nickol Valentina murió, el asesino se fue de Bucaramanga y se refugió en Barrancabermeja, según detallaron las autoridades en la imputación de cargos contra él.

Además, el delincuente de origen venezolano argumentó en medio de su defensa que había robado a la joven para comprarle unos tenis a su hijo que también tiene 15 años y vive en el vecino país. 

En la audiencia, el juez que estuvo al tanto del proceso no pudo contener las lágrimas al hacer un recuento de los hechos ocurridos ese día contra la menor de edad.

Incluso, el hombre tuvo que solicitar unos minutos de descanso, pues su llanto era casi incontrolable y no pudo continuar con el proceso. Posteriormente, reanudó la diligencia judicial y se disculpó ante todos los presentes, pues admitió que es humano y que el caso lo conmovió.

Por solicitud expresa de la Fiscalía, el juez penal municipal de Garantías de Bucaramanga envió a la cárcel a Pedro José Trujillo Pérez y le imputó cargos por los delitos de homicidio agravado y hurto calificado y agravado, los cuales fueron aceptados por el homicida.

Finalmente, el ente también reveló que el sujeto tiene antecedentes por robo en el mismo lugar donde cometió el crimen contra Nickol Valentina; sin embargo, en esas ocasiones no había sido judicializado.

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