Después de que Colombia entera repudiara el asesinato de nueve jóvenes soldados en Norte de Santander a manos de guerrilleros del Eln, el máximo cabecilla de esa guerrilla, Eliécer Herlinto Chamorro Acosta, alias ‘Antonio García’, insistió en dos tesis que viene esgrimiendo: equiparar la organización ilegal que comanda con las Fuerzas Armadas de Colombia legítimamente constituidas y asegurar que hasta ahora no hay un cese el fuego pactado con el Gobierno.

(Le interesa: Frente de Eln no ve “con buenos ojos” proceso de paz; Gobierno, lacerado con ataque)

La masacre de dos cabos y siete soldados regulares que pernoctaban en la vereda Villa Nueva, del corregimiento de Guamalito, municipio de El Carmen (Norte de Santander), no solo desató el repudio del alto Gobierno (el presidente Gustavo Petro llamó a consultas al equipo negociador en la mesa con el Eln), sino incluso del gobierno de Estados Unidos.

Quizá la visión más clara sobre la situación la aportó el jefe negociador del Gobierno, Otty Patiño, que ofrece un argumento razonable frente a lo que plantea como parapeto alias ‘Antonio García’ en el sentido de que el Eln tiene “derecho” a atacar porque aún no se ha pactado un cese el fuego.

“No se ha planteado un cese al fuego, […] pero, por supuesto, frente a una delegación del Gobierno donde participan militares, y los militares han demostrado su compromiso con la paz, hacer estos hechos desde luego lacera profundamente la confianza de la institucionalidad toda”, dijo Patiño en Caracol Radio.

“Al fin y al cabo uno no puede fracturar que por un lado va el Gobierno y por otro lado van las Fuerzas Militares. El compromiso de las Fuerzas Militares ha sido indudable, y matar soldados y policías, más allá de que no se haya firmado un cese al fuego, de todas maneras, lastima profundamente todo el espíritu y toda la confianza que merece tener este proceso de negociación”, agregó.

Lee También

El ministro del Interior, Alfonso Prada, también expresó una idea similar en el Congreso Nacional de Municipios, en Cartagena. “La agresión que cometieron contra los miembros del Ejército colombiano estando [el Eln] en una mesa [de negociación] ofende la inteligencia y al pueblo colombiano. Es vergonzoso estar sentado en una mesa cuando hay semejante grado de atrocidad contra la fuerza pública”, dijo.

Eln justifica asesinato de 9 militares

Sin embargo, alias ‘Antonio García’ no contempla ese tipo de consideraciones. En su cuenta en Twitter, escribió que “el ELN tiene el derecho de responder los ataques que recibe, por cuanto aún no hemos pactado ningún cese el fuego bilateral. Si descalificamos las acciones que realiza el ELN, también habría que descalificar las que hacen las fuerzas gubernamentales”.

De esta manera, busca enmarcar, en primera instancia, el cruel ataque a los nueve militares en Norte de Santander en una supuesta respuesta a una acción contra el Eln. Pero el comandante del Ejército Nacional, general Luis Mauricio Ospina Gutiérrez, ha insistido en que los jóvenes militares asesinados, orgánicos del Batallón Especial Energético y Vial No. 10, no adelantaban operaciones ofensivas, sino de control sobre el oleoducto Caño Limón-Coveñas.

Además, no eran soldados profesionales, sino soldados regulares que apenas cumplían los 10 meses de servicio militar. El comandante de las Fuerzas Militares, general Hélder Giraldo, también explicó que la zona donde estaba la patrulla militar no era catalogada como área de conflicto y por eso los siete jóvenes soldados que fueron asesinados, junto a dos suboficiales, sí podían prestar su servicio militar en la región.

La otra manera que encuentra alias ‘Antonio García’ para justificar el sangriento hecho es ampliar el ámbito de la idea de respuesta: “Desde enero el ELN recibió una serie de ataques y jamás existió pronunciamiento alguno, ni de funcionarios del gobierno ni de los medios de información, señalando dichos ataques como atentados contra la paz”.