Rodrigo Parada, representante del consultorio odontológico, dijo en Caracol Radio que la cirugía a la que fue sometido un niño de tres años que terminó internado en una UCI no era un simple procedimiento para sacar una muela, como se había mencionado inicialmente.
Expuso que “no era un procedimiento menor” y que el niño, identificado como José Rivero, fue remitido desde el 26 de febrero para que se llevara a cabo a un procedimiento de ortopediatría.
Señaló que, por “difícil manejo”, la operación debía hacerse bajo sedación, por parte de “un anestesiólogo, intensivista, muy reconocido”. Aseguró que el profesional tomó todas las medidas y les expuso a los padres del menor las razones por las que se haría ese procedimiento.
“Realmente, el menor fue atendido correctamente. Se atendieron bajo todos los parámetros de urgencia, de necesidad y de intervención inmediata, tanto al menor como a sus padres”, acotó Parada.
De acuerdo con la versión del representante de la IPS, “el médico intensivista y la odontóloga tomaron todas las medidas del caso”.
Caso de niño de tres años que terminó en UCI, en Bucaramanga
Sobre el incidente del menor, en el que la familia denunció demoras en la atención y fallos de procedimiento, la IPS también tuvo su versión.
Inicialmente, el representante de Oral Blanco no se refirió al caso como un paro respiratorio (versión que expuso la familia), sino que habló de una “bradicardia” (cuando el ritmo cardíaco se hace más lento de lo esperado).
Dijo que apenas el menor fue estabilizado, posterior al procedimiento de odontología, “fue remitido a un centro de salud especializado para que le prestaran una atención idónea”.
Esta versión también difiere de la que dio la abuela del menor, que dijo que el niño fue llevado a la clínica San Luís, en Bucaramanga, después unas 5 horas sin tomar determinaciones.
Finalmente, Parada dijo que los profesionales de la salud involucrados en el caso están dispuestos a atender las solicitudes de los familiares y de las autoridades.
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