En las últimas semanas el Grupo Médico por el Derecho a Decidir, dedicado al acompañamiento de abortos en Colombia, está alertando al Ministerio de Salud y al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) sobre la escasez del medicamento misoprostol, utilizado en la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) y otros procedimientos ginecoobstétricos.
Este fármaco es parte de la lista de medicamentos esenciales de la Organización Mundial de la Salud y se utiliza para tratar a pacientes en escenarios como hemorragia posparto, IVE y aborto incompleto. Además, es parte del Plan de Beneficios en Salud de Colombia.
(Vea también: Gobierno Petro salió al paso por desabastecimiento de medicamentos en Colombia; tiró plazo)
“Es un medicamento que salva vidas de mujeres y se usa en todos los niveles de atención. Además, en un país en donde se le está apostando a la reducción de la mortalidad materna y que tiene compromisos para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible, la disponibilidad de este es muy importante”, dijo a Pulzo María Mercedes Vivas, directora de la Fundación Oriéntame.
En donde está desabastecido el misoprostol en Colombia
Bogotá, Medellín, Neiva y Bucaramanga son las ciudades en donde la organización que acompaña las IVE ha identificado falta de acceso al medicamento.
Vivas es enfática en que, para la producción continua de este medicamento, Colombia está dependiendo de un solo laboratorio y eso lo pone en alto riesgo de desabastecimiento. Por ello, las organizaciones proaborto solicitan que se declare en desabastecimiento y como vital no disponible, lo que permitiría que se aceleren los procesos de registros sanitarios en curso y que se facilite su importación sin registro.
“Los problemas de producción y desabastecimiento se vienen anunciando al Ministerio de Salud y al Invima desde hace mucho tiempo, desde el 2022. Se comunicó que las farmacéuticas estaban dejando vencer los registros y que, aún con el registro activo, lo estaban dejando de producir”, siguió argumentando.
Adicionalmente, la fundación señala que este desabastecimiento podría aumentar la circulación de versiones alteradas y fraudulentas de misoprostol ―método más común de aborto clandestino empleado en Colombia, según un estudio del Instituto Guttmacher de 2020― y, por ende, poner en riesgo la vida y salud de las mujeres.
Qué responde Invima sobre escasez de medicamento misoprostol
Pulzo contactó al Invima para obtener respuestas sobre la gestión para garantizar el medicamento esencial y la entidad señala que está gestionando la definición del estado del medicamento.
En su reporte para medios sobre la atención a trámites represados de acuerdo a lo ordenado por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, el instituto señaló que el próximo 29 de febrero de 2024 finalizaría la gestión de los trámites de este medicamento y otros desabastecidos o en riesgo de desabastecimiento.
(Vea también: Invima explica el motivo del desabastecimiento de medicamentos en Colombia)
En este contexto, para el caso del misoprostol, el monitoreo indica que actualmente se cuenta con cuatro registros sanitarios, de los cuales tres están vigentes dentro del listado de abastecimiento y desabastecimiento de febrero de 2024.
Sobre el estado actual del medicamento, el Invima explica que “se encuentra en monitorización la tableta 200 mcg y tableta vaginal 50 mcg; es decir que no está actualmente declarado como desabastecido o en riesgo de desabastecimiento”.
Qué significa que un medicamento esté “en monitorización” en lista de Invima
La entidad señala que este estado consiste en un seguimiento permanente, debido a que las cantidades disponibles reportadas por los titulares del registro sanitario de un medicamento en seguimiento son limitadas para los siguientes tres meses de comercialización.
Además, también se declara “en monitorización” cuando la mayoría de los titulares del registro sanitario no han entregado el reporte de disponibilidad requerido por el Invima, lo que impide contar con la información suficiente para definir, clasificar o reclasificar el estado del medicamento como no desabastecido, en riesgo de desabastecimiento o desabastecido.
“El Invima reitera su voluntad de ejecutar a cabalidad el plan de trabajo propuesto para evacuar los trámites represados y mantiene su compromiso con la protección de la salud pública del país a través de acciones de inspección, vigilancia y control, conforme con la normatividad vigente y las correspondientes competencias”, concluyó la entidad.
.svg)
