En las últimas semanas los bogotanos han visto que las personas están perdiendo la vida por la criminalidad desatada y el aumento de los actos delincuenciales, incluso, a plena luz del día.

Según los datos de la Secretaría de Seguridad, el hurto de bicicletas incrementó el 35,8 % entre enero y octubre de este año, en comparación con los primeros 10 meses de 2019, y el homicidio creció en un 1,5 % en ese mismo periodo.

A esto se le suma que en octubre pasado se registraron aumentos en lesiones personales (2,4 %) y en hurto de vehículos (11 %). Los demás delitos han bajado, pero expertos lo atribuyen a la prolongada cuarentena.

Aun así, la ciudad sigue conociendo imágenes de ladrones armados atacando a sus víctimas (ver videos de casos recientes de inseguridad en Bogotá), hechos de sicariato (video de sicario asesinando a un hombre en un taxi) y disputas de organizaciones criminales (ver video de balacera entre bandas), que hace muchos años no se veían en la capital.

Cada vez que los ciudadanos conocen un caso nuevo, o son víctimas de estos delitos, recuerdan que en campaña Claudia López afirmó que sería “la jefe de Policía que haría temblar a los delincuentes”, por eso los bogotanos —en especial el millón de electores de la alcaldesa— le exigen cumplir esa promesa.

Pulzo contactó a concejales, expertos y al Gobierno Distrital para comprender lo que está pasando alrededor de la inseguridad en Bogotá y qué se está haciendo para disminuir los índices altos de ciertos delitos e impedir que otros tomen una tendencia al alza.

Inseguridad en Bogotá: ¿Qué dicen las cifras de delitos?

El boletín de Indicadores de Seguridad y Convivencia, de la Secretaría de Seguridad de Bogotá, con corte a octubre de 2020, detalla hacia dónde va la preocupación de los ciudadanos y las autoridades.

El homicidio, por ejemplo, tuvo un incremento del 1,5 % entre enero y octubre en comparación con el año anterior. En ese lapso de 2019 hubo 823 muertes violentas en la ciudad y en 2020 fueron 835. Ciudad Bolívar, Kennedy y Suba son las localidades más afectadas.

Además, la tendencia se ha mantenido en alza durante la segunda mitad del año: en julio fueron 65 víctimas; en agosto, 83 y en septiembre, 103. Solo hasta octubre bajó y se ubicó en 82.

Pero desde la Alcaldía no parecen ver el panorama tan negativo, pues el secretario de Seguridad, Hugo Acero, le dijo a Pulzo que tiene la “confianza” de que para final de año va a lograr una disminución en los indicadores de homicidio porque van tras las bandas que asesinan con sicarios.

En el delito de lesiones personales hubo una reducción del 30 %, pues en 2019 fueron 19.246 casos y este año, 13.406. No obstante, en el comparativo de octubre, el 2020 también reportó un aumento del 2,4 % frente al mismo mes del año pasado.

Los datos de hurto en diferentes escenarios han tenido variaciones. La siguiente tabla compara los meses de octubre de 2019 y 2020 y muestra que el hurto de vehículos tuvo un incremento del 11 %, mientras los demás delitos bajaron:

                Delitos Octubre 2019 Octubre 2020
Hurto a personas 11.332 6.804
Hurto a residencias 842 705
Hurto de automotores 294 328
Hurto de motocicletas 377 326
Hurto de celulares 5.078 4.415
Hurto de bicicletas 689 910

El hurto de bicicletas también subió en comparación al año anterior. Según los datos del Distrito, hay 5 localidades que concentran el 61,4 % de este delito (vea cuáles son las zonas de Bogotá donde más roban bicicletas y cómo denunciar un hurto):

– Kennedy: 16,7 %
– Engativá: 14,9 %
– Suba: 13,5 %
– Bosa: 9,5%
– Fontibón: 6,8 %

Esta es la tendencia total del año, que muestra un pico importante en el mes de mayo:

Secretaría de Seguridad de Bogotá
Secretaría de Seguridad de Bogotá

De las 8.955 bicicletas hurtadas en 2020, el 49,9 % de los casos fue en atracos, el 41, 4 % en situaciones de oportunidad, el 5,2 % en establecimientos y el 3,6 % por medio de engaños.

El 24 % de los hurtos se cometen en la madrugada, el 30 % en la mañana, en la tarde otro 24 % y el 22 % restante en la noche. Además, el 80,3 % de las víctimas son hombres y el 19,7 % son mujeres.

Las personas también reportaron que en el 48 % de los casos las asaltaron sin armas, 32 % con armas blancas, 12 % con armas de fuego, 5 % con otros objetos contundentes y en el 3 % de los casos utilizaron palancas.

Néstor Rosanía, director del Centro de Estudios de Seguridad y Paz, indicó que algunas de las acciones para atacar el hurto de bicicletas es que haya más policías patrullando las ciclorrutas. El experto llamó la atención sobre hacerles mantenimiento —iluminarlas y pavimentarlas— porque “si hay desaseo o mala infraestructura, esa ciclorruta se vuelve foco de inseguridad”.

Opiniones desde el Concejo de Bogotá

En las últimas semanas, el Cabildo Distrital ha hecho al menos tres debates relacionados con la seguridad en Bogotá. Así como algunos concejales aseguran que se han logrado avances, otros dicen que la Alcaldía de Bogotá no presta atención a las denuncias que se hacen allí.

Hace unos días, el diario británico The Guardian calificó a Bogotá como la “capital de la muerte para los ciclistas”En su momento, el secretario de Seguridad, Hugo Acero, calificó el titular como “injusto”.

Sin embargo, el concejal Jorge Colmenares, del Centro Democrático, considera que “es completamente cierto el titular porque los bogotanos prefieren usar otro sistema de transporte antes de ir a Transmilenio o SITP, y no tienen garantías al sacar su bicicleta si se cruzan con un ladrón”.

Por su parte, el concejal Julián Rodríguez, de Alianza Verde, partido de Gobierno de la alcaldesa Claudia Lópezseñaló que no sirve que las autoridades adopten “una postura negacionista” y una “excusa para no responder como se debería a los cuestionamientos de la ciudadanía”.

¿Qué proponen los concejales para mejorar la seguridad en Bogotá?

Rodríguez dice que la Alcaldía de Bogotá debe identificar los puntos calientes donde más se presentan los hurtos y que allí dispongan “de fuerza policial, de CAI móviles de carácter rotativo a lo largo de la ciudad, especialmente en intersecciones viales y puentes”.

Por su parte, Colmenares pide nuevas tecnologías para identificar a los delincuentes e incrementar el pie de fuerza. “La Alcaldía solicita nuevos policías, pero debe respaldarlos porque cuando ellos hacen su trabajo no pueden presentarse como enemigos de la ciudad”, añadió.

Acero le aseguró a Pulzo que focalizar acciones en determinadas zonas de la ciudad, como lo piden los concejales, son precisamente las que han permitido la reducción en la mayoría de delitos.

Cámaras de vigilancia en Bogotá

El concejal del Centro Democrático también dijo que en los debates de seguridad ha hecho “denuncias que han sido ignoradas por la Alcaldía”. Colmenares señala que hace varios meses le entregó un reporte a Acero en el que le indicaba que hay “200 cámaras en puntos estratégicos de la ciudad que están completamente inactivas”.

“Se le señaló al secretario punto por punto en dónde no servían y es la hora que no ha pasado nada. No las han desmontado, no han buscado nuevas tecnologías para incrementar la seguridad”, añadió.

Sobre esas cámaras, Acero explicó que “se trata de unos contratos que la Alcaldía tuvo en el pasado con empresarios de cámaras que no se renovaron y están sin usar. Ya no están contratadas”.

Sin embargo, afirmó que la administración Distrital le está apuntando a incorporar otras cámaras de seguridad al ‘C4’ (Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo).

Se trata de vincular 663 cámaras de Transmilenio, las del Ministerio de Transporte en las entradas de la ciudad, las cámaras ‘salvavidas’ de tránsito y 270 puntos en centros comerciales, conjuntos y de particulares. Eso significa que, dice Acero, alrededor de 2.000 cámaras se sumarían a las 5.000 que sí están funcionando; aunque eso no será posible este año y no se tiene un estimado de tiempo para hacerlo efectivo porque faltan detalles jurídicos y técnicos en los convenios.

Delitos en Transmilenio

Colmenares también dice que Transmilenio tiene un contrato que sobrepasa los 25.300 millones de pesos con una empresa de seguridad para la prevención de hurtos, pero cuestiona su efectividad porque “ahora los bogotanos se suben al sistema y los asesinan, y a los culpables no los encuentran”.

El contrato con la empresa Unión Temporal GOS 2020 es para proteger la infraestructura del sistema, impedir amenazas contra la vida e integridad física de los usuarios y contener a los colados.

No obstante, se siguen conociendo víctimas de delitos en Transmilenio, y no deja de ser frecuente la presencia de ladrones en los buses, como los que hace apenas una semana le arrebataron la vida a un hombre de familia dentro de un articulado, y hasta episodios de extorsión.

Y todo esto pese a que las cifras muestran una reducción de delitos en el sistema, que también podría explicarse por la baja afluencia de usuarios durante el confinamiento

Acero explicó que una de las estrategias en Transmilenio fue atacar no solo las estaciones donde más se reportaban delitos, sino los entornos. “Parte del logro importante de la reducción de hurtos de celulares fue haber controlado Transmilenio”, dijo.

¿Qué dice la Alcaldía de Bogotá sobre la seguridad en la ciudad?

La Secretaría de Seguridad entregó resultados sobre los 10 primeros meses de su gestión. El secretario Acero explicó que recibieron una ciudad con “logros importantes” y admitió que “el [ex]alcalde Enrique Peñalosa tuvo avances importantes en materia de seguridad”.

Acero dijo que Peñalosa le entregó a López una ciudad “con una reducción en los homicidios” y otros indicadores, pero con incrementos altos en otros delitos, como los sexuales (19,8 %).

El funcionario indicó que la Alcaldía de Bogotá debe reconocer que la “sensación de inseguridad ha aumentado dentro de los ciudadanos” e insistió en que es “debido a la serie de videos e imágenes que se presentan a través de las redes”, pero una vez más se comprometió con los bogotanos:

“De 10 delitos están aumentando 2 y tenemos la plena confianza que en el caso del homicidio vamos a terminar con un resultado favorable y vamos a hacer todos los esfuerzos para que el hurto de bicicletas disminuya”.

Acero también indicó que ha atacado “estructuras criminales organizadas” como las bandas de narcotráfico, que es “el delito que más afectación tiene sobre la seguridad” en Bogotá.

El Distrito también espera recibir “algo más de mil policías nuevos” finalizando el 2020, que se sumarán a los 16.780 uniformados de la capital.

Para finalizar, Rosanía destacó que el mayor acierto hasta ahora de la Secretaría de Seguridad es que sea transparente con los datos, pues eso permite identificar los puntos calientes de criminalidad en la ciudad y diseñar políticas públicas; pero también dio su opinión sobre lo que hay que mejorar:

“Articular más a las entidades privadas como la Superintendencia de Vigilancia, todo el tema de celadores y empresas de seguridad porque hay un gran volumen de información en temas de inteligencia. Esos datos se pierden porque no están articulados con el Distrito y la Policía. Creo que ha sido el gran error de la administración”.

El experto dijo que el déficit de policías que tiene la ciudad también lo tiene en temas de ciencia y tecnología, e insistió en que Bogotá “tiene muy poca inteligencia para la cantidad de ciudadanos y de delitos en un país tan complejo”.