El incendio que el pasado martes 28 de junio dejó 53 personas muertas y más de 24 heridas en el pabellón 8 de la cárcel de Tuluá (Valle del Cauca) habría sido el resultado de una intensa riña entre dos jefes de patio que se disputaban la venta de droga en el lugar, según aseguró uno de los sobrevivientes.

En entrevista con El Tiempo, uno de los reclusos, cuya identidad no fue revelada, dio su versión de los hechos y explicó que minutos antes de que iniciara la tragedia los dos ‘caciques’ se habrían enfrentado fuertemente por el control de la venta de drogas.

Además, contó que los delincuentes quisieron utilizar colchones como ‘escudos’, pero al incendiarlos desataron un caos que finalmente se salió de control.

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Qué habría detrás del incendio en cárcel de Tuluá

En su relato al periódico, el preso aseguró que los dos capos de patio, quienes están entre los calcinados, son reconocidos con los alias de ‘Brayancito’ y ‘Miller’. Ambos tenían gran poder dentro del penal debido a que ejercieron su control mediante amenazas, estafas y agresiones.

“Desde el domingo empezó la pelea entre ‘Brayancito’, uno de los jefes de la ‘oficina de Tuluá’, y ‘Miller’, de ‘los Caleños’. ‘Brayancito’ trabaja para ‘Pipe’ (Andrés Felipe Marín Silva), jefe de la banda de ‘la Inmaculada’”, le dijo al medio mencionado.

Y es que el diario señala que entre los reos fallecidos había miembros de las bandas ‘La Inmaculada’, ‘La Casona’, ‘la Empresa’, ‘los Blindados’ y ‘La Cruz’, unas de las más poderosas y peligrosas de Tuluá, pues, al parecer, los grupos criminales lograron que varios sicarios y delincuentes no fueran trasladados de penal para participar en la disputa.

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En su versión, el recluso apunta a que ‘Brayan’ tenía la misión de tomar el poder del pabellón y de tres ollas de vicio que funcionan en Tuluá, que dejan millonarias ganancias por su poder en tres departamentos e, incluso, dentro de la propia cárcel.

“Adentro, un gramo de droga de 10.000 pesos se vende en 30.000 pesos; y una papeleta de bazuco de 1.500 pesos se comercializa en 10.000. Afuera, una sola de las ollas, que mueve cocaína al Eje Cafetero, puede mover hasta $ 1.000 millones al mes”, dijo el preso a EL TIEMPO.

Por último, explicó que en un punto de la confrontación algunos de los partícipes prendieron fuego a varios colchones para distanciarse, pero la situación se hizo incontrolable porque las llamas pasaron a la estructura del pabellón, que tiene más de 70 años de antigüedad.