Según testigos, el muchacho estaba en un andamio de unos cinco metros de altura cuando habría tocado una cuerda de energía de alta tensión. La descarga lo tiró al piso y le causó delicadas lesiones.

“Yo iba para una cita médica y vi cuando el joven cayó. Tenía una herida abierta en el cuello y otra en la cabeza. Se veía muy mal”, dijo una mujer.

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Por su parte, una señora que cuida carros en el sector expresó: “Pobrecito, es muy joven. Parecía que estuviera agonizando. Respiraba rápido y abría los ojos. Cuando vi el montón de gente en la esquina me percaté de lo sucedido y crucé la calle y fui a Medicádiz a pedir auxilio. Les dije que le prestaran los primeros auxilios, que no lo dejaran morir”.

Agregó: “ Cuando volví, ya se lo estaban llevando en una ambulancia. Si sobrevive, es porque Dios lo tiene para algo muy grande. Además de la descarga eléctrica, súmele el golpe que recibió. Fue impresionante verlo. Al parecer, también estaban arreglando un daño en la red eléctrica”.

El lugar fue señalizado con una cinta amarilla. Recién ocurrió el hecho, en la carretera quedó una caneca de pintura, una escoba, un palustre y una gorra negra; también un lago hemático.

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Q’HUBO arribó al lugar, no obstante, las personas encargadas de los arreglos locativos del local no entregaron ninguna versión de lo sucedido. Aunque algunos testimonios aseguraron que el muchacho había fallecido, Q’HUBO conoció que al cierre de esta edición permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Asotrauma.