Y es que dos son los indicios a los que se refieren para manifestar sus dudas a través de su abogado, Hernán Varón, de acuerdo con Blu Radio: la falta de soportes documentados que corroboren el diagnóstico y la facilidad con la que las autoridades le entregaron el cuerpo a su familia.
El apoderado de la familia de Daniel Osorno Márquez, nombre real del criminal también reconocido por una decena de reincidencias, también había señalado que el mismo joven le había dicho que lo habían aislado para que no se fugara, y no porque tuviera el virus.
En ese sentido, se había pedido a la Fiscalía que no cremara al muchacho, algo que efectivamente no sucedió. Sin embargo, lejos de contribuir a aclarar las cosas, esto terminó por seguir sembrando dudas debido a que el procedimiento más común con los fallecidos que hubieran estado infectados es el de incinerar sus restos para impedir que el cadáver sea foco de propagación del virus.
Asimismo, la familia se pregunta por posibles señas de maltrato que tendría el cadáver del muchacho, pero será el dictamen de Medicina Legal lo que finalmente aclare estos interrogantes.
En redes sociales circulan imágenes del supuesto entierro del joven en las que se ve una numerosa aglomeración a su alrededor. Entre las personas que rodean el féretro incluso muchas no portan el tapabocas como es debido.
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