En un libro que escribió el periodista Gerardo Reyes sobre Álex Saab (‘Álex Saab, la verdad’) se conoció la calidad de relación laboral que sostuvieron la exsenadora Piedad Córdoba y su asesor de comunicaciones Andrés Vásquez Moreno. En el texto quedó claro que ella veía a su subalterno como un hijo, mientras que él la consideraba a ella como una madre.
Ese afecto voló en pedazos y ahora los señalamientos de Vásquez Moreno —según los cuales Córdoba manipuló la liberación de Íngrid Betancourt cuando estuvo secuestrada por las Farc, y que Córdoba sí es ‘Teodora Bolívar’, el enigmático personaje que se cruzaba correos con el abatido ‘Raúl Reyes’— tienen en serios aprietos a la política, no solo en sus aspiraciones para llegar al Congreso, sino que intensifica la mirada de la justicia que ya está sobre ella.
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Precisamente, Vásquez Moreno entregará este martes ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia un oficio de 17 preguntas que ese alto tribunal le había dado para que respondiera. Pero esto no es más que una fase adicional en un proceso que se viene surtiendo desde hace más o menos medio año.
Vásquez Moreno, citado por el periodista de Caracol Radio Juan Eduardo Espinosa, aseguró que él nunca pidió hacer la declaración en la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, en la que señala que Córdoba esperaba, con la liberación de Íngrid Betancourt, sacar réditos políticos para ella y para el entonces presidente de Venezuela Hugo Chávez, y que fue difundida el pasado fin de semana por Noticias Caracol.
“Respondí hace seis meses, cuando Piedad Córdoba todavía no era candidata al Congreso. Fui sin abogado a esa diligencia porque no sabía que tenía que llevar uno. Pregunté en la corte, me dijeron que no”, dijo el exasesor de Córdoba, citado por Espinosa.
De acuerdo con el periodista, los abogados le dijeron a Vásquez Moreno que no tenía que responder nada relacionado con Álex Saab porque eso no hace parte del proceso conocido como de la Farc-política y que si respondía algo de Saab eso podría dañar cualquier investigación futura porque se podrían invalidar.
“Él trató de explicarle eso a la magistrada Cristina Lombana, que es la que lleva el caso de Córdoba, y ella le contestó que no es el testigo el que dice qué es y qué no es prueba”, aseguró Espinosa. “Le mandaron un oficio de 17 puntos, y él [Vásquez Moreno], ante el temor que le da que lo lleven a la fuerza, dijo que va a entregar todo este martes”.
“Va a entregar 17 puntos concretos con pruebas documentales, teléfonos, correos electrónicos, y básicamente todo lo que tiene de sus años de trabajo como asesor de Córdoba”, aseguró Espinosa.
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