“La comunidad dijo que es mentira que sean 8 los niños que murieron y que serían entre 16 y 18”, afirmó en Noticias Uno el periodista Guillermo Gómez al citar testimonios de habitantes de la zona rural aledaña a la vereda Aguas Claras II, en San Vicente del Caguán, donde sucedió el bombardeo del pasado 30 de agosto.
“Esa es la cifra que no revela el Estado y que no han revelado quienes tienen que ver con esto. Según las cifras son 18 niños, según lo que las familias dicen”, aseveró Idaly Saldaña a ese noticiero.
En ese nuevo número de víctimas mortales estarían tres niños que habrían sido “rematados” por el Ejército, al parecer, tras huir heridos de los bombardeos, según otras declaraciones de vecinos del sector citadas por el informativo.
En la zona atacada aún habría enterrada una bomba sin explotar y los campesinos quieren que sea extraída de allí por las Fuerzas Militares, mencionó el medio de comunicación.
La cifra denunciada en Noticias Uno por los pobladores de esa zona del Caquetá seguiría alimentando la polémica en cuanto a la presencia y muerte de niños en el campamento en el que además fue abatido Gentil Duarte, alias ‘Gildardo Cucho’, líder de las disidencias de las Farc en esa región.
La información de la muerte de los menores no se conoció sino hasta el pasado 5 de noviembre, dos meses después del citado operativo, gracias a la denuncia que hizo el senador Roy Barreras durante la moción de censura contra el hoy exministro de Defensa Guillermo Botero.
En ese debate, el congresista expuso un documento de Medicina Legal que evidenciaba que entre las víctimas mortales del ataque aéreo había 7 niños, de entre 12 y 17 años.
Sin embargo, al día siguiente la Fiscalía publicó un documento en el que se descubría que la cifra de menores muertos ascendía a 8, en un grupo de 17 fallecidos (7 adultos) y 2 cadáveres más sin identificar.
Mire aquí el informe de Noticias Uno:
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