Toda la verdad de cómo ocurrieron los hechos que terminaron con la vida de 18 personas, 8 de ellas menores de edad, estaría en un informe de inteligencia que permanece bajo reserva, indicó ese rotativo.

Sin embargo, ese medio divulgó detalles hasta ahora desconocidos por la opinión pública como, por ejemplo, que el Ejército desechó un ataque con francotiradores para dar de baja a alias ‘Gildardo Cucho’, porque al parecer lo protegía un cinturón de seguridad de al menos 20 hombres.

También se supo que el Ejército habría tenido conocimiento previo de la existencia de menores de edad en el sitio donde ocurrió el bombardeo por informes entregados por Herner Carreño, personero de Puerto Rico, Caquetá, aunque el comandante del Ejército, general Nicacio Martínez, aseguró a El Tiempo que si eso hubiera sido cierto la fuerza habría tomado otra decisión.

Asimismo, queda en el ambiente la sensación de que la cuestionada directriz del Ejército que no exigía la perfección para “lanzar operaciones con un 60 por ciento-70 por ciento de credibilidad y exactitud” y que había sido archivada luego del escándalo sobre la presunta reaparición de ‘falsos positivos’ cobró una inusitada relevancia.

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