Según Coronell, Semana “disfrazó de información relevante y de interés público un desquite” contra Julios Sánchez Cristo, director de W Radio, que que publicó informaciones “molestas para algunos directivos” de la revista.

Se refiere a un informe difundido por la emisora el miércoles pasado, que se basó en información del portal primerapagina.com que decía: “Grupo Semana suspende hasta por 60 días las ediciones impresas de cinco revistas tras nuevos despidos”.

El informe de primerapagina.com, reproducido por W Radio, también ventilaba el despido de José Guarnizo (editor capitalino), Camilo Jiménez (director de Arcadia) y Sara Malagón Llano (editora de la publicación), lo mismo el de 15 empleados administrativos y algunos colaboradores del nuevo proyecto digital de Vicky Dávila.

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Pero dijo más que a Dávila le redujeron en un 50% su contrato) y que hubo recorte en el tamaño del nuevo set de televisión. En total, según la información del portal difundida por la emisora, “Van 250 trabajadores –administrativos, comerciales y periodísticos– despedidos en Publicaciones Semana”.

Esa misma mañana, Vicky Dávila aseguró que fue ella la que le ofreció a Semana bajarse el sueldo y le pidió a Sánchez Cristo que hiciera lo mismo. Esto no lo menciona Coronell en su columna de este fin de semana.

Pocos minutos después de que W Radio difundiera esa información, Semana publicó un artículo bajo el título ‘Grupo Prisa cotiza mínimos históricos en bolsa’, ilustrado —y por ahí empieza  la crítica de Coronell— con un tríptico con un edificio de Prisa en España, la fachada de Caracol Radio en Colombia y la cara de Sánchez Cristo.

Para Coronell, Semana “no puede […] usar la información de sus páginas, impresas o digitales, para castigar a quienes se atrevan” a contar cosas como la salida de personal de la revista. “Usaron su foto [la de Sánchez Cristo] en una información, sin mayor interés público, para pasarle cuenta de cobro menos de dos horas después de la publicación radial”.

Sin embargo, Coronell también reprocha que, esa misma mañana, la sección de Economía de Semana, a la cual tacha de “madrugadora, rencorosa y anónima”, escribió otro artículo con el título ‘Declive histórico del clan Polanco: su participación en el Grupo Prisa Vale 4,2 millones de euros’.

“Para ilustrar la nueva vindicta usaron la foto de Jesús de Polanco, el fundador de Prisa fallecido hace 13 años, y nuevamente la de Julio Sánchez Cristo, pero invertida digitalmente para que mirara para el otro lado”, observa Coronell, y sentencia: “Con estas publicaciones SEMANA incumple el deber de separar sus intereses corporativos de su misión periodística. Con todas las letras digo que es un acto antiético, además de innoble y antiestético”.

Pero va más allá: “Los accionistas de SEMANA son dueños de la marca, de su magnífico edificio, de los equipos, muebles y enseres, pero no de la información. La información es un bien público y solo se puede ejercer en beneficio de los ciudadanos, no de desquites empresariales. Como periodista tengo el deber de decirlo y ustedes, como lectores, tienen el derecho a saberlo”.

Esta es la segunda columna que escribe Coronell contra la revista Semana. La primera fue en mayo del año pasado, cuando cuestionó las decisiones editoriales que tomó ese medio en relación con la publicación de un escándalo de presuntos falsos positivos en el Ejército.

Por eso, fue despedido de Semana por el fundador Felipe López y su columna fue cancelada. Pero, después, María López, presidenta de Publicaciones Semana, y Alejandro Santos, director de la revista, le pidieron que regresara.