En un primer término, la juez 16 de control garantías no aceptó una recusación contra la Fiscalía y contra ella misma, con la que los abogados de ‘Santrich’, Eduardo Matías y Diego Martínez, intentaron frenar la audiencia, de acuerdo con Semana.
Aunque esto solo consiguió retrasarla, la otra estrategia de la defensa sí logró darle largas. La revista detalla que se trata de una impugnación de competencia lo que obligó a remitir el caso a la Corte Suprema para que defina en manos de quién debe quedar el proceso a Seuxis Paucias Hernández Solarte, nombre real de ‘Jesús Santrich’.
Los apoderados del exguerrillero consideran que Hernández Solarte no se ha posesionado como representante a la Cámara por razones de fuerza mayor, pero que sí “fue reconocido como congresista electo por el consejo nacional electoral”, tal como se escucha en una grabación de la sesión a la que tuvo acceso CM&.
De esta manera, tampoco se consiguió exponer pruebas ni proceder con la imputación, la legalización de captura y la medida de aseguramiento, mientras el alto tribunal define si tiene o no fuero parlamentario, para lo cual tiene tres días de plazo.
No obstante, otra de las aristas del asunto, de acuerdo con Semana, es que por petición del propio ‘Santrich’ la jueza accedió a hacer un recuento de lo sucedido en la primera audiencia llevada a cabo en el hospital Méderi, con lo que habría admitido “tácitamente que Santrich no estaba en plenitud de conciencia y razonamiento con lo cual esa diligencia resultaría ilegal”.
Desde su llegada al complejo de Paloquemao, la actitud del exguerrillero fue incluso desafiante, gritando alguna arenga, haciendo gestos con las manos y con un semblante que incluso parecía no coincidir con el del supuesto mal estado de salud que lo llevó a estar internado en la mencionada clínica de Bogotá el fin de semana.
Ya dentro del juzgado, alcanzó incluso a lanzar otra pulla: “Espero que esta audiencia sirva para dar un paso a la paz y no a la ratificación de la calificación de ‘república banana’ que tiene nuestro país”, declaró, justo después de arrojar una cita del libertador Simón Bolívar:
“No hay mejor forma de alcanzar la libertad que luchar por ella”
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