“Los culpo a ustedes, maricas, hijos de puta”, expresó el alcalde Dau en la trasmisión virtual, frase que acompañó con un gesto obsceno que hizo con sus dedos (pistola).

El insulto quedó grabado y el video fue compartido en redes sociales, y allí también se escucha que uno de los concejales le responde a Dau con las mismas palabras subidas de tono: “Respeta, tú, güevón”.

Medios locales, como El Universal, cuestionaron que el debate sobre temas importantes para la ciudad se dé entre madrazos e insultos, mientras que afuera la ciudadanía sigue clamando ayudas económicas y sociales para enfrentar la crisis que se vive por cuenta de la pandemia del coronavirus.

Y es que según la grabación, de la que no se conoce sino una parte de poco más de dos minutos, el alcalde les estaba reclamando a los concejales opositores, a los que culpó de la situación.

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“Yo aspiro a que los demás miembros de los 15 de oposición, los que sean nuevos, todavía tienen tiempo de recapacitar y abrirse de esos de la vieja guardia, que representan la misma politiquería de siempre”, dijo. Y agregó.

“El pueblo me eligió para acabar con la corrupción, para acabar con la clase politiquera y la politiquería que tienen a Cartagena sumida en la corrupción, la pobreza y la desigualdad. Por lo menos, la mitad de la curva de la situación en la que se encuentra actualmente la ciudad, es culpa de los coadministradores, corresponsables: ustedes, concejales, son los culpables de la situación que está pasando ahora en Cartagena, y ahora se las vienen a tirar de santurrones”.

De ahí en adelante vinieron los agravios, y la sesión finalizó con la acalorada discusión. Esto, dice el medio cartagenero, pese a que la cita era para establecer beneficios y reducir “las tasas de intereses y mora aplicables a las deudas tributarias de la vigencia 2019 y anteriores”.

Así las cosas, el debate tendrá que esperar, y los cartageneros anhelan que quienes manejan las riendas de la ciudad se insulten menos y se unan para ayudarlos a sobrellevar los efectos de la pandemia.

Este es el vergonzoso episodio de la discusión.