Se trata de un hombre conocido con el alias de ‘Simón’, quien pese a tener una familia, se acercaba a los entornos universitarios para lograr relaciones extramatrimoniales con estudiantes y convencerlas de unirse a los grupos radicales que cometen actos vandálicos durante las protestas, explicó Blu Radio.
Pero esta no es la única modalidad que utilizaban para atraer adeptos, estos delincuentes que, según confirmó la alcaldesa de Bogotá Claudia López, harían parte de las disidencias de las Farc y el Eln.
Otra de las estrategias de los grupos residuales la efectuaba alias ‘la Abuela’, que después de viajar a Venezuela a recibir el dinero del Frente Décimo de las disidencias, volvía al país para “reclutar estudiantes consumidores de bebidas alcohólicas”, añadió la emisora.
Este hombre que cobraba por infiltrar las marchas también habría estado en Cuba “entre el 19 y el 26 de abril de 2016, en medio de la mesa de diálogo entre las Farc y el Gobierno”, agregó el medio.
Hay un tercer hombre que tenía la tarea de reclutar jóvenes, y se trata de alias ‘Rabelo’. Esta persona trabajaba con una ONG defensora de derechos humanos con el único objetivo de tener acceso a comunidades de escasos recursos y aprovechar su situación de vulnerabilidad para ofrecerles dinero a cambio de causar desórdenes en las marchas.
En otro informe, Blu Radio señala que ‘Rabelo’ también era el encargado de movilizar los explosivos empleados en los actos vandálicos contra la Fuerza Pública. Además, tenía contactos cercanos con otro hombre que aparece en escena y es alias ‘Franco’.
Este estudiante universitario se encargaba de “desplazar a los jóvenes reclutados hasta el estado de Apure, en Venezuela, para formarlos de manera política, inteligencia delictiva y elaboración de artefactos explosivos no convencionales” y de documentar los destrozos para mostrar pruebas a las disidencias, en cabeza de alias ‘Gentil Duarte’ e ‘Iván Mordisco’, añadió la emisora.
Otro reporte de las autoridades citado por la emisora asegura que hay jóvenes que pertenecen a subculturas, como la ‘skin head’, que terminaron reclutados para adelantar “actividades contra la gestión del Distrito en medio de las protestas sociales” y afectar la manera en la que la Alcaldía de Bogotá le hacía frente a las marchas en la capital.
Todos estos detalles permitieron la captura de seis personas vinculadas con estos grupos y cercanas a diferentes comunidades. La mayor parte de esa información se obtuvo de alias ‘Alejandro’, “cabecilla político y de masas del Frente Séptimo de las disidencias”, capturado en abril de 2019, puntualizó la emisora.
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