Andrés Hurtado saltó a la fama en los últimos días debido a un video en el que sale insultando y humillando a una funcionaria de tránsito de Bogotá.

En la grabación, Hurtado arremete contra la mujer que le decía que moviera su camioneta de una zona en la que estaba prohibido parquear. El sujeto le grita diciendo que es una camioneta “de 300 millones” y usando varios términos peyorativos contra ella.

Después de que el video se viralizara, usuarios de redes sociales emprendieron una labor investigativa en la que establecieron quién era el individuo y hasta descubrieron que el vehículo no era suyo, sino de su papá.

Asimismo, la revista Cambio encontró que Carlos Hurtado, padre de Andrés y dueño de la camioneta, tiene un gran número de demandas en procesos civiles por deudas sin pagar.

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El hombre tiene 9 demandas y, según ese medio, le debe plata a dos condominios campestres, un grupo empresarial, un centro comercial, una cooperativa y hasta un conjunto residencial.

(Vea tambiénIdentifican al conductor que humilló a guías de tránsito en Bogotá: “Todo me es lícito”).

De igual forma, esa revista encontró que Hurtado debía plata de una valorización en Bogotá y que por eso su camioneta le fue embargada en 2018 (actualmente ya está desembargada).

Para rematar, el precio de la camioneta ni siquiera llega a los 300 millones de pesos que vociferaba el sujeto del video. En portales especializados de venta, una Toyota Prado nueva vale 245 millones de pesos y una modelo 2011 (como la de la grabación) llega a los 140 millones de pesos.

Quién es Andrés Hurtado, hombre que insultó a funcionaria de tránsito en Bogotá

Hurtado, que mientras insultaba a la mujer se jactaba de tener mucha plata, fue descubierto en redes sociales por personas que lo conocían y que se encargaron de difundir su nombre.

Aunque no hay confirmación de las autoridades, los internautas se pusieron en la tarea de identificar al joven y dieron con su perfil en Instagram. Según esa red social, Hurtado se describe como piloto de avión.

Allí, Hurtado había dejado una frase bíblica en la descripción de su perfil en esa red social que ya se encargó de eliminar.

“Todo me es lícito, pero no todo me conviene”, era la frase de la epístola a los corintios que el sujeto tenía en esa plataforma.

Por el momento, el individuo implicado en la agresión verbal a la funcionaria no ha emitido pronunciamiento alguno sobre lo sucedido. De hecho, puso privado su perfil de Instagram y luego lo borró del todo.