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La avenida Ambalá, reconocida como una de las arterias más transitadas de la ciudad, será objeto de una importante intervención durante el próximo año. El plan contempla una inversión que ronda los 25.000 millones de pesos y responde a una de las obras estratégicas incluidas por el Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) en su agenda de mejoras para la movilidad local. Según lo aprobado, este proyecto busca atacar directamente los problemas de congestión vial que afectan a este corredor, particularmente entre las calles 25 y 37, así como en el tramo ascendente comprendido entre la glorieta del Vergel y el sector de la Universidad de Ibagué.
El alcance de la obra va más allá de la simple repavimentación. En ambos sentidos de la avenida, se prevé reconstruir la carpeta asfáltica y adecuar las condiciones de tránsito, de acuerdo con los lineamientos del SETP. A esto se suman intervenciones puntuales en calzadas y glorietas estratégicas ubicadas sobre este trayecto, buscando así optimizar el flujo vehicular y, de modo especial, priorizar la seguridad para conductores y peatones, quienes se ven afectados a diario no solo por la congestión, sino también por el aumento constante en el número de vehículos matriculados en la ciudad.
Rocío Lozano Delgado, gerente del Sistema Estratégico de Transporte Público, destacó en declaraciones citadas que la adjudicación del proceso ya se concretó, permitiendo asegurar cerca de 24.500 millones de pesos que serán orientados a la modernización integral de esta vía. Lozano Delgado señaló que la avenida Ambalá constituye un eje fundamental para la movilidad de toda la ciudad, motivo por el cual su mejora se considera prioritaria en la estrategia de movilidad urbana.
La intervención obedece a una planificación que busca responder no solo a las necesidades actuales de tráfico, sino también a los retos que representa la tendencia creciente de vehículos en circulación. Incluye tanto la pavimentación de la vía como la optimización de glorietas clave, elementos que permitirán reducir los tiempos de desplazamiento y aumentar la seguridad vial, beneficiando a miles de usuarios del transporte público y privado.
De acuerdo con la información proporcionada por el SETP, el inicio de los trabajos está programado para el primer trimestre de 2026. El periodo de ejecución se ha estimado en entre ocho y nueve meses, plazo durante el cual se espera minimizar las afectaciones al tráfico mediante una planificación adecuada de cierres y desvíos, aunque no se han detallado los planes de manejo de tráfico específicos.
¿Cómo impactará la intervención de la avenida Ambalá en el funcionamiento del transporte público? Este tipo de obras, según datos del Sistema Estratégico de Transporte Público, busca no solo favorecer el desplazamiento de los vehículos particulares, sino también mejorar la eficiencia y puntualidad del transporte público, que es utilizado diariamente por un considerable número de habitantes de la ciudad. El mejoramiento de la infraestructura y la reducción de los tiempos de recorrido deberían traducirse en un beneficio directo para los usuarios, aunque el proceso de intervención podría implicar cambios temporales en rutas y horarios durante la ejecución de las obras. Por eso, es relevante que los ciudadanos estén atentos a las recomendaciones del SETP para adaptarse a las modificaciones viales que surjan durante este periodo de transformación.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
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