Un grave incidente sacudió la zona rural de Buga, en el centro del Valle del Cauca. Un ataque con artefacto explosivo fue perpetrado en la vía que conecta el sector de Guaqueros con el corregimiento de La María. Como resultado, Diego Valencia, de 51 años, padre de un concejal del municipio de San Pedro, y un menor de edad sufrieron heridas, pero se reportan fuera de peligro bajo atención médica en el hospital San José de Buga, según informó El Tiempo.
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De acuerdo con las declaraciones del secretario de Gobierno de Buga, James Gómez, el hecho ocurrió aproximadamente a las 6:00 p. m. del 30 de mayo. Valencia se movilizaba en un furgón acompañado de sus nietos cuando fue atacado con armas de fuego y, posteriormente, con un explosivo instalado en el área. El vehículo fue encontrado abandonado poco después, como se menciona con el rotativo.
Las autoridades locales respondieron de manera inmediata. Según la Policía Valle, se activaron los protocolos de reacción y se conformó un equipo especializado entre la Policía, Fiscalía y unidades de inteligencia, con el objetivo de esclarecer el atentado y determinar la identidad de los responsables. Adicionalmente, se reiteró el llamado a la comunidad para colaborar con información a través de la línea 123.
El atentado en Buga no es un caso aislado; se enmarca en un contexto complejo de seguridad en el Valle del Cauca. Como lo ha señalado la gobernadora Dilian Francisca Toro y las autoridades regionales, el departamento enfrenta elevados índices de homicidios, extorsiones y narcotráfico, delitos relacionados en su mayoría con disputas de bandas criminales.
Durante recientes consejos de seguridad, donde participaron la gobernadora Toro, el fiscal delegado contra la Criminalidad Organizada, Raúl González Flechas, y altos mandos de la Policía y el Ejército Nacional, se definieron acciones para fortalecer la lucha contra la delincuencia organizada. Solo en 2024, Valle del Cauca registró 2.358 homicidios, y municipios como Cali, Palmira, Jamundí, Cartago, Tuluá, Buenaventura y Buga concentran la mayor parte de estos crímenes.
Organizaciones como ‘La Inmaculada’, ‘La Oficina del Norte’ y ‘Los Flacos’, así como disidencias armadas, mantienen presencia en diferentes zonas del departamento, incentivando enfrentamientos y afectando la seguridad local. Las estrategias planteadas incluyen la conformación de grupos investigativos conjuntos, patrullajes coordinados y la creación de una ‘cápsula multicrimen’ para enfrentar el delito de homicidio y desarticular redes delictivas prioritarias. También se busca atacar las estructuras financieras que sustentan a estos grupos.
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La gobernadora recalcó que el combate al crimen debe enfocarse no solo en la captura de los delincuentes materiales, sino en la identificación y desarticulación de toda la cadena financiera y logística que sostiene estas estructuras en la región. Por su parte, el alcalde de Cali, Alejandro Éder, volvió a solicitar apoyo del Gobierno Nacional para intervenir en zonas como Jamundí y el norte del Cauca, donde el narcotráfico sigue alimentando la violencia y el microtráfico en la capital del Valle.
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