De acuerdo con la Unifesp, el gigante suramericano, donde serán reclutados cerca de dos mil voluntarios, será el primer país fuera del Reino Unido en participar en esta fase de prueba del tratamiento.
“Es una estrategia muy importante en este momento, cuando la pandemia está ocurriendo en todo el mundo y está en ascenso en Brasil. Estamos en la aceleración del contagio de la curva epidemiológica”, afirmó Soraya Smaili, rectora del centro educativo.
Smaili, igualmente, aseguró que está previsto que los ensayos clínicos comiencen entre la segunda y la tercera semana de junio. El plazo máximo para observar el resultado es de aproximadamente doce meses.
La Universidad de Oxford enfatizó este miércoles en un comunicado de prensa que la vacuna, que está actualmente en la fase dos, será testada también en otros países que están en etapa de análisis y aprobación.
El estudio cuenta con el apoyo del ministerio de Salud y será conducido por el Centro de Referencia para Inmunobiológicos Especiales (CRIE) de la Unifesp. Además, la Fundación Lemann cubrirá los gastos de infraestructura médica y equipos necesarios.
En la actualidad, hay varios países y empresas farmacéuticas que están trabajando en una cura eficiente para combatir el COVID-19, que ha causado hasta el momento más de 380.000 muertes en todo el mundo.
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