Esos casi 300 pacientes tuvieron contacto con 790 personas más y ninguna de ellas resultó infectada con coronavirus, concluye el estudio, citado por el New York Post.
Aunque son preliminares, dice el ‘Post’, dichos resultados les sirvieron a las autoridades surcoreanas para levantar ciertas restricciones de cuarentena y movilidad de los ciudadanos.
De acuerdo con el Press Herald, las pruebas PCR no tienen la capacidad de distinguir las partículas de virus muertas de las vivas, y por ello es que anteriormente se consideraba, erróneamente, que los pacientes recuperados podían seguir contaminando a otros.
Este descubrimiento permite cierta tranquilidad una vez se relajen las medidas de distanciamiento en las ciudades, destaca The Print e incluso, por lo menos en Corea, un paciente recuperado no está obligado a dar negativo para volver a trabajar.
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