Las fiestas se celebraban pese a las prohibiciones para evitar contagios por COVID-19, una cifra considerada récord en la capital de España.

Esta cifra entre la noche del viernes al domingo supera a la de 370 fiestas detectadas el anterior fin de semana del 19 al 21 de febrero, según datos de la Policía Municipal de Madrid.

En contraste, el fin de semana en que las autoridades detectaron un mayor número de fiestas clandestinas en Bogotá fue en el fin de semana del 31 de octubre y primero de noviembre de 2020, cuando la cantidad de fiestas ilegales de esos dos días dejó 123 locales sellados.

Tunjuelito y Chapinero fueron las zonas de Bogotá en donde más se concentraron las fiestas clandestinas mencionadas.

En dicha ocasión, los dueños de los establecimientos trataban de mostrar como fachada locales comerciales en los que se vendían comida; sin embargo, hacían reuniones en donde no se cumplía con ningún protocolo de bioseguridad.

Lo que sí ha sido común en Bogotá y ciudades como Cartagena es que se han encontrado fiestas en las que participan menores de edad, como una del barrio El Perdomo, de Bogotá, que se celebró a finales de enero pasado.

En Madrid se violaron los protocolos de bioseguridad

En todas las fiestas de la capital española, los asistentes no llevaban tapabocas e incumplían el horario de cierre de establecimientos, además de saltarse la prohibición de congregarse en un domicilio personas no convivientes.

Desde el inicio del segundo estado de alarma en España el pasado 25 de octubre los agentes municipales intervinieron 6.480 fiestas ilegales en Madrid.

La portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Inmaculada Sanz, aseguró que la Policía seguirá actuando “con toda la contundencia” y proponiendo “todas las sanciones que sean necesarias” para evitar estas conductas, que “en la mayoría de los casos” se dan en “pequeños formatos”, siendo las “macrofiestas” la excepción.

Los agentes suelen actuar tras recibir “denuncias vecinales” y “en la medida de lo posible se sanciona a todas las personas”, si bien en “domicilios particulares las cosas son más complicadas”, dijo.

Muchos jóvenes son captados por internet o fuera de los bares y discotecas por relaciones públicas que organizan estos eventos, que luego desaparecen tras llevarles al lugar de la fiesta y cobrar la cantidad indicada, aunque sin dinero efectivo porque las consumiciones se pagan con el teléfono móvil.

Representantes vecinales del centro de Madrid denunciaron en febrero ofertas de paquetes de viajes por 150 euros (unos 180 dólares) desde Francia para pasar un fin de semana de fiesta en un piso turístico de Madrid.

La región de Madrid, de unos 6,6 millones de habitantes y donde rige un toque de queda de las 23.00 a las 06.00 hora local, es la que suma mayor número de fallecidos y de casos positivos de COVID-19 en España, pese a lo cual tiene unas de las medidas menos restrictivas en vigor del país.

Madrid registra 13.874 fallecidos y 586.913 contagios, de los 69.609 y 3.204.531 del conjunto del país, de unos 47 millones de habitantes, según datos del Ministerio de Sanidad español.