Después de que comenzó la invasión de Vladimir Putin a Ucrania, ya se han reportado unos 874.000 refugiados y, por lo menos, 2.000 civiles muertos en el conflicto.

Ya con la guerra desatada, Rusia ha intensificado los bombardeos sobre Kiev y sobre Járkov. En esta última Moscú ya mandó a varios paracaidistas, que atacaron un hospital militar, reseñó El País, de España.

Del bando ruso, agrega el medio internacional, ya hay 498 militares muertos y 1.597 heridos durante la primera semana de la invasión.

Uno de los aspectos más preocupantes es la cantidad de refugiados, pues unas 874.026 personas han abandonado sus casas; Polonia es el destino favorito, apunta el diario, ya que allí han llegado más de 300.000 ciudadanos.

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Aunque Rusia se dio luces de querer un cese el fuego con Ucrania, intensificó sus bombardeos en ese país y se vio expuesta a la apertura de una investigación de la Corte Penal Internacional por crímenes de guerra.

De otro lado, Ucrania dice que no aceptará ningún ultimátum en esas negociaciones, que se celebrarán en Bielorrusia.

Así pues, Rusia reivindicó el miércoles la captura de la ciudad portuaria de Jersón (sur). También concentró artillería cerca de Kiev y da ideas de un asalto inminente sobre la capital.

El País resalta que la toma de Jersón facilitaría el paso a Odesa, también cerca del mar Negro, y el control de la salida al mar de Ucrania. Ese movimiento resultaría estratégico toda vez que allí hay aguas donde otros tres países tienen costas: Turquía, Rumania y Bulgaria.

AFP reporta daños provocados por presuntos bombardeos rusos contra edificios de los servicios de seguridad y una universidad de Járkov, la segunda mayor ciudad del país, y en zonas residenciales de Zhytomyr, muy cerca de la capital.

Kiev dice resistir invasión rusa

La agencia internacional señala que las tropas rusas se han encontrado con “una encarnizada resistencia en su avance en suelo ucraniano”.

“El enemigo está acercando sus fuerzas a la capital”, dijo el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, pero la capital “resiste y resistirá. Nosotros vamos a pelear”, prometió el exboxeador.

Asimismo, en un mensaje televisivo, el presidente ucraniano, Volodimir Zelinski, denunció la invasión como un atentado contra la identidad de Ucrania.

Tienen la orden de borrar nuestra historia, de borrar a nuestro país, de borrarnos a todos”, afirmó.

En otro video, alabó la resistencia “heroica” de su pueblo que “ha roto los planes del enemigo en una semana”. “Planes escritos desde hace años: pérfidos, llenos de odio hacia nuestro país”, añadió.

Por su parte, Putin dice que su invasión busca “desmilitarizar” y “desnazificar” a Ucrania, una exrepública soviética que busca acercarse a la OTAN y a la Unión Europea.

El presidente ruso también reclama garantías de que la OTAN no seguirá expandiéndose hacia el este y que se vetará el ingreso de Ucrania en la alianza militar.