Dentro de las realezas del mundo, la española Letizia Ortiz, reina de la madre Patria, se ha destacado por su elegancia y buena actitud en los actos protocolarios que encabeza.

A lo largo de los años, Letizia ha logrado conquistar la simpatía de los españoles y ubicarse como uno de los íconos de moda de su país, combinando un estilo clásico y una modernidad, sin llegar a lo polémico o escandaloso. De igual manera, lo han hecho sus hijas, Leonor y Sofía, quienes no llegan a la mayoría de edad y también son vistas como ejemplo a seguir en cuanto a moda se trata.

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Volviendo a la Reina consorte de España, a sus 50 años, siempre brilla en los actos públicos, no obstante, en varias oportunidades se ha notado indispuesta, sobre todo cuando pasa muchas horas de pie en los eventos.

Las dolencias de la Reina de España

Ya se sabía que la Reina fue diagnosticada hace varios años con una dolencia llamada metatarsalgia crónica, que es una afección que ocasiona dolor e inflamación en una parte específica del pie llamada metatarso. Esta dolencia se incrementa cuando se realizan actividades físicas como correr o saltar y en buena parte de los casos, se debe a malformaciones o deformidades de nacimiento en el pie o cuando se usa calzado muy ajustado.

Ahora ha trascendido que a esa dolencia, la reina Letizia suma un nuevo mal, también en el pie que le ocasiona terribles dolores.

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El nuevo mal de la Reina Letizia

Se trata del Neuroma de Morton, un engrosamiento del nervio interdigital en el espacio que existe entre el tercer y cuarto dedo del pie.  Esta dolencia es crónica y con el tiempo empeora.

Quien padece del neuroma siente un dolor similar al que se experimenta cuando hay choques eléctricos en una parte del cuerpo. Las dolencias pueden disminuir con tratamiento. Actualmente se usa radiofrecuencia para lograrlo, no obstante, al parecer la única manera de eliminar por completo los malestares en el pie sería con cirugía, que luego requiere un posoperatorio de quietud y cuidado

El neuroma de Morton en el caso de la Letizia le ha llegado por el uso constante de zapatos de tacón alto que producen presión y ocasionan deformidad. La misma monarca ha explicado a la prensa que esa es la razón por la cual en diversos actos debe sentarse y tomar descansos.