Escrito por:  Redacción Mundo
Sep 8, 2025 - 8:47 pm

En un contexto caracterizado por su agitado clima político y las tensiones con Estados Unidos, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sorprende nuevamente. Por decreto, decidió que las celebraciones navideñas en el país comiencen a partir del próximo 1 de octubre.

(Vea también: “No es entrenamiento”: EE. UU. envía contundente mensaje a Venezuela luego de ataques)

“Ya huele a Navidad”, justificó el mandatario, y explicó que su objetivo es homenajear y agradecer al pueblo venezolano. Con una serie de medidas que priorizan la economía, la cultura y la alegría del pueblo, el presidente intenta modificar las dinámicas de una sociedad impactada por una realidad política intensa y conflictos tanto internos como con los Estados Unidos.

Aunque esta decisión pueda parecer inusual para algunos, no es la primera vez que Maduro recurre a ella. En años anteriores como 2024, es bien conocido que eligió iniciar las festividades navideñas mucho antes del 1 de diciembre, fecha tradicional en Venezuela para el comienzo de estas celebraciones.

Lee También

Sin embargo, la medida contrasta con la realidad e incertidumbre que enfrenta el país, marcada por tensiones políticas y una crisis económica y social aguda. El régimen de Maduro ha sido cuestionado por sus políticas internas y constantes roces internacionales, especialmente con los Estados Unidos.

¿Por qué Maduro adelanta la Navidad en Venezuela?

A lo largo de la historia, Venezuela ha enfrentado diversos periodos de conflictos internos y externos, pero siempre ha encontrado en su cultura y festividades como la Navidad, un espacio para la unión y la expresión de su espíritu alegre y resiliente.

Al igual que en ocasiones anteriores, argumenta que el propósito de reprogramar el inicio de la Navidad es favorecer la economía, impulsar la cultura del país, y ofrecer una dosis extra de alegría a la ciudadanía. Para el gobierno venezolano, no hay nada como el tono festivo instaurado con las actividades navideñas para disminuir tensiones y elevar los ánimos del pueblo.

Este año, el espíritu festivo deberá coexistir con tensiones políticas crecientes y una crisis que representa un desafío tanto para la sociedad como para la administración de Maduro. Cómo será recibido este decreto, en una realidad que difiere tanto de la alegría natural de la Navidad, es algo que solo el tiempo revelará.

* Pulzo.com se escribe con Z

Lee todas las noticias de mundo hoy aquí.