Dos migrantes africanos fueron lanzados al agua por la Guarda Costa Griega. Una práctica que les costó la vida a estos dos migrantes. Los hechos sucedieron el 15 de septiembre de 2021 y una de las personas era de Costa de Marfil y la otra de Camerún. Venía de Turquía rumbo a Grecia. La versión de varios testigos es que estos dos hombres pudieron llegar a la isla griega de Samos, sin embargo sus cuerpos fueron hallados días después en la costa del mar Egeo cerca a la provincia de Aydin.

La investigación ha sido liderada por grandes casas periodísticas europeas: Der Spiegel, Mediapart, Lighthouse Report y The Guardian. Estos dos migrantes salieron de sus casas para ir en busca de un lugar mejor, huyendo de la guerra, pero lo que encontraron fue la muerte y el rechazo del ‘mundo civilizado’. 

Sidy Keita tenía 36 años, y Didier Martial Kouamou Nana 33. Víctimas de una práctica que es conocida como ‘pushbacks’ una solución que está más cerca a la barbarie que a la civilidad que pregonan los europeos. Consiste en devolver a los migrantes  sin ningún tipo de garantías ni proceso legal a sus lugares de origen. También utilizan la violencia como en este caso que los dos migrantes muertos fueron golpeados y tirados al mar por la guardia costera griega. 

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A cabo Praso en Samos llegaron 36 personas que el 15 de septiembre de 2021 habían abordado una embarcación en cercanías de Kusadasi en Turquía. La información del arribo de los migrantes la facilitó la ONG Human Rights Legal Project, alertando a todas las autoridades que tienen que ver con migración y refugiados. 

Es sabido que las autoridades griegas son expertas rechazando migrantes. Los testigo que entrevistaron los periodistas de investigación les relataron que lo que hicieron con ellos fue una cacería. Poco después de estar en tierra escucharon testigos y ocho migrantes lograron escapar a las montañas mientras los otros 28 fueron regresados al mar, entre ellos un bebé, una mujer embarazada y niños pequeños. Los lanzaron a mar abierto en dos pequeñas balsas salvavidas.

Un testigo clave que sobrevivió relató lo sucedido con Sidy y Didier. Ibrahim, un exmiembro de la marina de Camerún contó que había pasado la noche en un bosque, él, Keita y Kouamou. Pero fueron detenidos el 16 de septiembre. Ellos tres hacían parte del grupo de los ocho que lograron escapar inicialmente. De estos ocho, cuatro lograron llegar a un campo de refugiados, mientras los otros cuatro fueron detenidos. Una mujer y tres hombres. La mujer fue detenida en un monasterio mientras que los tres hombres, Ibrahim, Sidy y Didier fueron detenidos en una carretera cercana. Los cuatro los arrojaron al mar sin ninguna protección, la mujer y Ibrahim los rescataron los guardacostas turcos, Sidy y Didier no corrieron con la misma suerte. Murieron ahogados, asesinados por las autoridades griegas.

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Ibrahim contó que los golpearon y los arrojaron al mar sin ninguna protección. Vio a Keita desaparecer bajo las olas y no supo que pasó con Kouamou. Después s enteró que se habían ahogado puesto que ninguno de los dos sabía nadar.

Las autoridades griegas en comunicado de prensa han dicho lo siguiente: “Las autoridades policiales helénicas, siguiendo un estricto marco legal disciplinario, investigan toda la información que se les comunica y se refiere a presuntos incidentes de malos tratos en las fronteras, incluidas las denuncias de devoluciones no procesadas ( retrocesos), con el fin de que se impongan las sanciones previstas en la ley y se eviten conductas similares en el futuro. Las acusaciones sobre la violación del principio de no devolución no se corresponden con la realidad y, de hecho, socavan el trabajo de la policía helénica en las zonas fronterizas operativas”.

La Guardia Costera Helénica también se pronunció: “Las prácticas descritas y atribuidas a los activos operativos y al personal de la guardia costera no se corresponden con nuestros procesos operativos para disuadir los cruces fronterizos no autorizados o tratar con ciudadanos de terceros países durante la vigilancia de las fronteras marítimas. .”