Por: El Espectador

El Espectador es el periódico más antiguo del país, fundado el 22 de marzo de 1887 y, bajo la dirección de Fidel Cano, es considerado uno de los periódicos más serios y profesionales por su independencia, credibilidad y objetividad.

Este artículo fue curado por pulzo   Nov 21, 2025 - 10:01 am
Visitar sitio

El Ministerio de Cultura de España, a través de su directora general de Bellas Artes y Patrimonio, Ángeles Albert, anunció la puesta en marcha de un ambicioso proyecto para renovar las exposiciones permanentes del Museo Nacional de Antropología y el Museo Nacional de América, ambos ubicados en Madrid. Este anuncio se realizó durante una rueda de prensa mantenida en el Museo Nacional de Antropología, donde se dieron a conocer los principales ejes y objetivos de las futuras exposiciones.

Los programas museográficos han sido elaborados por equipos de expertos y buscan ampliar la perspectiva desde la cual se contempla la realidad histórica de ambos museos. Según información proporcionada por el Ministerio, se persigue el propósito de cuestionar y superar el eurocentrismo presente en la formación histórica de estas instituciones, invitando a mirar el pasado y el presente desde diversos ángulos y voces.

En cuanto a la inversión, el Ministerio detalló que la renovación del Museo de Antropología demandará una partida de 4,4 millones de euros, y se espera que la transformación esté finalizada en el segundo semestre de 2028. Por su parte, la actualización del Museo de América tiene prevista una inversión más elevada, de 9,2 millones de euros, con una fecha estimada de conclusión para el verano de 2028.

La revisión del Museo Nacional de Antropología, inaugurado en 1875 como el primer museo español dedicado a esta disciplina, tendrá como punto de partida los lazos entre antropología y colonialismo en el siglo XIX. De esta manera, la exposición exhibirá y analizará los orígenes eurocéntricos que marcaron la creación del museo, poniendo sobre la mesa temas como el extractivismo —es decir, la apropiación y explotación de recursos naturales—, el esclavismo y los sistemas de dominación, que incluyeron la evangelización y la imposición de discursos científicos.

Lee También

Dentro del recorrido museográfico, el segmento ‘¿Cómo podemos? Habitar el mundo’ abordará conceptos contemporáneos como sostenibilidad, identidad y migraciones. Finalmente, la sección titulada ‘¿Cómo proponemos? Remediar el presente: laboratorios de imaginación social’ se configurará como un espacio de participación, permitiendo que comunidades y colectivos aborden cuestiones actuales como la emergencia climática, presentando sus propios relatos y puntos de vista sobre los objetos exposicionados.

Por su parte, el Museo de América —inaugurado durante el régimen de Francisco Franco— será objeto de una renovación profunda que responderá a vacíos de décadas anteriores. En la reforma de los años noventa, quedaron fuera cuestiones esenciales como la perspectiva de género y el análisis del impacto de la esclavitud en América. La nueva propuesta contempla cuatro secciones: ‘Imaginarios’, que examina la construcción de la idea de América por parte de los coleccionistas europeos; ‘Personas y seres’, que indaga en la mirada colonial sobre los habitantes americanos; ‘Dominaciones y resistencias’, que subraya el papel de los pueblos originarios y comunidades invisibilizadas en procesos históricos; y ‘Cosmovisiones y saberes’, con énfasis en la diversidad y futuro de América.

A estas áreas se añadirán espacios dedicados al diálogo y la reflexión, algunos centrados en iniciativas antirracistas y otros abiertos a conferencias y debates que impulsen el conocimiento y valoración de las culturas indígenas.

¿Por qué es importante incorporar perspectivas decoloniales en los museos?

La incorporación de visiones decoloniales en museos como el Museo Nacional de Antropología y el Museo Nacional de América responde a la necesidad de revisar críticamente los relatos históricos, reconocidos en el texto como marcados tradicionalmente por el eurocentrismo. Esta transformación no solo permite visibilizar voces y experiencias marginadas, sino que contribuye a construir una sociedad más inclusiva y consciente de su diversidad.

Al reconfigurar las narrativas y dar espacio a relatos alternativos, los museos pueden desempeñar un papel pedagógico fundamental, promoviendo el respeto por la diferencia y fomentando el debate sobre la identidad, el pasado y el futuro de comunidades que históricamente han sido relegadas de los grandes relatos oficiales.


* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.

* Pulzo.com se escribe con Z

Lee todas las noticias de mundo hoy aquí.