De acuerdo con Carlos Oliveros, un ciudadano colombiano que vive desde hace seis meses en Wuhan (epicentro del brote), este coronavirus ha alterado por completo la cotidianidad de la ciudad, de 11 millones de habitantes.

“Antes de ir a cualquier lugar público, las autoridades de salubridad le piden a uno que pase por unos medidores de temperatura corporal. Siento que es algo similar al temor que se generó en Colombia con el H1N1, pero acá sí que se toman medidas más serias”, manifestó Oliveros en una entrevista para el diario El Tiempo.

Habitantes de Wuhan, China

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De igual manera, Carlos aseguró en el diálogo con el impreso nacional que “está tranquilo y que no siente miedo”. “Uno se queda con incertidumbre de cómo empieza a evolucionar la cuestión. Sin embargo, hay que tener tranquilidad”, concluyó.

Por su parte, Rosa Wan Chi Cheng, una ciudadana colombo-china que vive en Nantong, afirmó en Blu Radio que en su lugar actual de residencia hay varias personas contagiadas y que las medidas de salubridad han aumentado en los últimos días.

“La gente trata de no salir mucho a las calles. Si quieren hacerlo debe ser con tapabocas. Mi familia está muy asustada, pero nosotros tratamos de vivir normalmente”, expresó Wan Chi Cheng en la emisora.

Ciudadanas chinas

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Finalmente, Andrés Vargas, publicista colombiano que vive hace más de 10 años en China, señaló en diálogo con Caracol Radio que “sí hay precaución por la propagación de este virus, pero que en general en el país no se viven todavía momentos de pánico”.

Cabe señalar que, hasta el momento, las autoridades del país asiático, que celebra este sábado el Año Nuevo, han confirmado la muerte de 41 personas y que hay otras 1.300 contagiadas.