Tras una primera ronda de negociaciones infructuosa, el ejército de Ucrania se enfrenta este martes a una nueva ofensiva de las tropas rusas en Kiev, Járkov, el puerto de Mariúpol y otras ciudades.

Los socorristas ucranianos informaron de al menos 9 muertos en el bombardeo ruso este martes en el centro de la ciudad de Járkov, la segunda más grande de ese país, no lejos de la frontera con Rusia. El video fue registrado por un usuario de Twitter en el que se ve un misil que impacta contra la construcción, según datos del jefe de la administración regional de Járkov, Oleg Sinigubov.

Según las denuncias, en medio de los ataques se presentó un bombardeo contra un edificio estatal situado en la plaza principal, que dejó un saldo de nueve muertos entre ellos tres niños. 

“Al menos diez personas murieron, más de 20 heridas. Los socorristas y los voluntarios rescataron vivas de los escombros a 10 personas, según un recuento preliminar”, indicó el servicio ucraniano de situaciones de emergencia.

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Al respecto, el jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, advirtió en rueda de prensa que habrá nuevas sanciones contra Rusia por la invasión a Ucrania y llamó a poner fin inmediatamente al ‘baño de sangre’.

“Hemos llegado a una situación muy dramática, Ucrania está literalmente luchando por su supervivencia”, explicó sobre la grave situación.

En el sexto día desde que Rusia lanzó la invasión contra su vecino, la ONU estima que más de 660.000 personas han huido de Ucrania. La situación parece camino a convertirse en la crisis de refugiados más grande de Europa en este siglo, afirmó la portavoz de la agencia para los refugiados (ACNUR).

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski se pronunció en un video difundido por la red social Telegram y se refirió a la situación de esta ciudad: “El bombardeo contra Járkov es un crimen de guerra. Es terrorismo de Estado por parte de Rusia”.