Un paciente de Dusseldorf (Alemania) se ha convertido en el tercer caso del mundo confirmado de curación de VIH tras recibir un trasplante de células madre para tratar una leucemia, lo que acerca un poco más la posibilidad de disponer de un tratamiento aplicable a gran escala.
El caso ha sido estudiado por el consorcio IciStem, coordinado conjuntamente por el University Medical Center de Utrecht (Países Bajos) y el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa de Badalona (Barcelona, España), centro impulsado conjuntamente por la Fundación La Caixa y el Departamento de Salud de la Generalitat.
Se trata de un varón, que prefiere preservar su identidad, al que se le retiró el tratamiento antirretroviral contra el VIH de forma supervisada tras someterse a un trasplante de células madre para tratar una leucemia mieloide y, cuatro años después, el virus no ha reaparecido.
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El estudio, que publica hoy la revista Nature Medicine, ha demostrado la ausencia de VIH y de respuesta inmunológica contra este virus en el cuerpo del paciente a pesar de no recibir tratamiento durante cuatro años, unas evidencias que permiten certificar que es un caso nuevo de curación.
En 2008, un equipo médico de Düsseldorf (Alemania) diagnosticó la infección por el VIH a este paciente e inició el tratamiento antirretroviral estándar, que permite controlar la infección y reducir la cantidad de virus hasta niveles tan mínimos que resultan indetectables en un análisis de sangre, y tampoco tienen capacidad de contagio.
Cuatro años más tarde, en el 2012, sufrió una leucemia, por lo que fue sometido a un trasplante de células madre.
En estos casos tan singulares se busca a una persona donante de células madre que tenga una mutación llamada CCR5 Delta32, que hace que el cuerpo no produzca una de las puertas de entrada del VIH en las células y, por lo tanto, dificulta la infección.
Más de cinco años después del trasplante, y habiendo pasado por dos recaídas de la leucemia y varias complicaciones, el paciente se estabilizó y el equipo investigador consensuó retirarle el tratamiento antirretroviral contra el VIH.
“Han pasado diez años del trasplante y cuatro desde que se interrumpió el antirretroviral; normalmente, cuando se para el tratamiento el virus reaparece en cuatro días, así que cuatro años es un periodo suficiente para anunciar que es un caso de curación”, ha explicado a EFE el coautor del artículo e investigador del IrsiCaixa, Javier Martínez-Picado.