Desde el comienzo Jairo se notó incómodo, callado, más introspectivo que de costumbre.
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‘El rey del arroz’, como lo han llamado sus compañeros, cayó parado en el reto del día, pues el plato debía tener ese ingrediente, pero algo no andaba bien con su salud, y eso fue evidente en ‘Masterchef‘.
En repetidas oportunidades se le vio tomándose la mandíbula, algo que pudo mermar su desempeño en la preparación.
Adrián Parada lo reconoció y dijo que su amigo estaba disminuido por un desgaste en su mandíbula. Hasta bromeó: “Esa sonrisa perfecta no es gratuita”.
No obstante, a Jairo se le vio muy juicioso, trabajando en silencio y dándole a su fuerte: el arroz.
En el desarrollo de la prueba se notó que su compañera, Juliana Galvis, habló todo el tiempo, y cuando ‘Jairito’ se animaba, lo hacía entre los dientes.
Todo el mundo se dio cuenta de su afección; de hecho, Martha Isabel Bolaños, cuando le dio a probar de su receta, lo notó y dijo que él tenía la mandíbula inflamada.
‘Masterchef’: Jairo no pudo hablar durante la prueba
Finalmente, no pudo más, y le tocó sacar tablero y marcadores para hacerse entender y englobar la idea de su preparación: que el arroz quedara en el centro del plato con unas almendras, al lado de unos champiñones y la salsa que le iba a dar el toque a la receta.
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Ante cámaras, no habló demasiado, pero su cara de dolor lo dijo todo.
Al momento de presentar el plato, se la jugaron por la condición se Jairo, que no podía hablar. La receta se llamó ‘Señales de arroz’, pues el actor apenas podía decir palabra.
Su situación no pasó desapercibida y para comunicarse con el jurado tuvo que acudir a su tablero para explicar que tenía un dolor de mandíbula.
Luego, ante cámaras, como pudo, sostuvo que sufrió de “un dolor muy berraco”, pero que pese a él necesitaba ganar.
Pero los jurados les dieron palo, y duro. El arroz no fue el protagonista y eso les costó. Carpentier se le robó el tablero y lo retrató para consolarlo.
Al final, Jairo y Juliana quedaron con el delantal negro, que pasaron al reto de eliminación, con el riesgo de salir de la competencia.
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