Encuentre acá en Caracol Televisión todo sobre nuestras telenovelas y series, lo mejor de los realities del momento, lo que sucede con los artistas y más contenido de entretenimiento.
Se trata de Adriana Arango, quien interpreta a Ligia en todas las temporadas de ‘La reina del flow’. Antes de ser una reconocida actriz y del éxito que ha tenido con su carrera, se enfrentó a un momento muy complicado durante su infancia.
Lee más: Dos actrices de La Reina del Flow actuaron juntas hace años en Séptima Puerta)
Ver esta publicación en Instagram
Sucedió cuando estaba en segundo de primaria. Ella misma dice en una entrevista que “a nivel de aprendizaje había cosas que costaban muchísimo”, precisamente una de estas fue aprender a leer la hora en el reloj de manecillas.
Actualmente puede hacerlo, pero en ese entonces era todo un reto y por eso inició la situación, pues recuerda que tenía una tarea en la que debía dibujar la hora y a ella se le ocurrió pedirle a su hermano que bajaran su reloj de la pared para que ella lo calcara y entregara el proyecto.
Adriana Arango se quedó muda por un año
Los dos intentaron hacerlo, pero este se les salió de las manos y terminó roto, lo que desencadenó todo el trauma de la actriz.
“Mi papá conmigo siempre fue tan fresco, tan alcahueta y se enojó mucho”, explicó en Los Impresentables de Los 40.
Por primera vez en mucho tiempo escuchó gritar a su padre, dijo que no les volvería a hablar y esto la impactó tanto que fue entonces que decidió quedarse en silencio por un año entero, lo que cambió por completo su vida.
@los40colombia ¿Por qué Adriana Arango dejó de hablar UN AÑO?😳 #soyimpresentable #impresentables #los40colombia #actuacion #infancia ♬ sonido original – LOS40 Colombia
(Lea también: Personaje clave de ‘La reina del flow’ dijo que no estará en esta temporada; envío mensaje)
Al ver la situación, sus padres la metieron a un colegio para niños con necesidades especiales y esto le hizo todo mucho más complicado, ya que no se sentía cómoda, jamás encajó y tampoco se motivaba a hablar, ya que no había nadie con quien quisiera comunicarse.
Allí estuvo todo un año y lo catalogó como “una pesadilla”, consideraba que todo era demasiado diferente, se sentía extraña y eventualmente empezó a decir algunas palabras, “ese año fue aterrador, pero no sabía ni con quién hablar en ese colegio”, mencionó.




Finalmente, cuando pasó a cuarto de primaria sus padres se mudaron de Bogotá a Medellín y pasó del colegio especial a una institución pública. Asegura que este fue el mejor momento de su primaria, fue cuando se volvió ella misma, el inicio de la exitosa actriz que conocemos ahora.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO