Según el funcionario, el contrato sí es real, pero es una ayuda espiritual que está contemplada para la Casa de Nariño y los anteriores presidentes y primeras damas también la han tenido.

“La Presidencia de la República siempre ha tenido un cura, un padre, que dirige el oratorio que hay en la Presidencia, que dicta misa y ayuda en la asesoría espiritual de los funcionarios, esto no es de hoy, todos los presidentes han tenido un padre y también lo tiene el Congreso de la República”, explicó Lizcano en entrevista con Blu Radio.

Además, detalla que se trata de un convenio con el Episcopado, con la Iglesia. Además, enfatizó en que la primera dama Verónica Alcocer es una mujer muy devota y por eso la contratación de un padre.

“Estos padres siempre han tenido un apoyo por parte de la presidencia porque es el cura de la presidencia, eso ha sido histórico y se le pegan 5 millones de pesos por esa gestión”, explicó el director del Dapre.

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Sumado a esto, aclaró que el sacerdote no es solo para la primera dama, sino también para los funcionarios. Y recordó que la contratación de Nerú se tomó por decisión propia de Lizcano.

“Los dos (Nerú y el cura) son personas que ayudan a la gestión de la presidencia de la República donde trabajan más de 1.000 personas”, afirmó en esa misma emisora.

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Interrogado en esa emisora sobre si el sacerdote es amigo de la primera dama, Lizcano explicó que es un padre que envía el Episcopado y es con quienes tienen el convenio que, insistió, viene de todos los presidentes.

“Históricamente es lo que yo recibí, todos los padres merecen un sueldo, es un buen mensaje para los católicos”, sentenció.