El famoso coreógrafo Nerú Martínez Carrillo, conocido artísticamente como Nerú, fue contratado por el Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (DAPRE) para encargarse de ejecutar actividades que mejoren el ambiente laboral.

Según se lee en el contrato de prestación de servicios firmado entre las partes, el cartagenero llegó a un acuerdo para adelantar ciertos programas con la entidad hasta el próximo 31 de diciembre de 2022. Por su trabajo, el bailarín recibirá un pago total de 28 millones de pesos, que serán cancelados en mensualidades de $ 7 millones.

“El contratista [Nerú] se obliga a prestar a la entidad los servicios de apoyo a la gestión al Grupo de Bienestar y Desarrollo del Área de Talento Humano, en la realización de actividades en materia de salud mental y física, que contribuyan al clima laboral”, se lee en el objeto del contrato.

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El artista, recordado por las clases de aeróbicos y baile que daba en programas matutinos de televisión, deberá promover estilos de vida saludables, a través de la “práctica de actividades de acondicionamiento físico, con el fin de prevenir enfermedades y mejorar las condiciones de vida”.

Pero allí no queda todo, pues también tendrá que producir videos que promuevan la práctica adecuada del deporte, actividad física, recreación, aprovechamiento del tiempo libre y hábitos de vida saludable, de acuerdo con lo estipulado en su contrato.

Acá, una parte del contrato compartido en Twitter:

Por qué contrataron a Nerú en la Presidencia

Según compartió el mismo usuario en la red social, el bailarín fue quien se ofreció a prestar sus servicios por medio de una carta firmada con fecha del primero de septiembre del presenta año.

En su propuesta, Nerú dejó claro que el plazo para la ejecución del trabajo sería el 31 de diciembre, y que por ello pretendía una remuneración mensual de 7 millones de pesos.

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En su ofrecimiento, el famoso presentó 6 puntos diferentes sobre las funciones que pretendía cumplir, los cuales fueron finalmente aceptados por el DAPRE.

Por último, Nerú especificó que su trabajo se llevaría a cabo en Bogotá o en cualquier lugar que la entidad lo requiera, por lo que se mostró dispuesto a “viajar cuando las circunstancias lo requieran”.

Acá, la carta con la que Nerú hizo su propuesta: