Para cumplir eso, el Ministerio de Trabajo buscará facilitar el empleo juvenil y crear un piso mínimo para que los trabajadores por horas y los que están en la informalidad reciban salud, pensión y riesgos laborales.

El viceministro de Relaciones Laborales e Inspección, Carlos Alberto Baena, dijo que quiere que los trabajadores “lleguen a la vejez con mecanismos de protección”.

Esto significa que, por ejemplo, “un trabajador que devenga 700.000 pesos al mes, y que trabaja cuatro horas diarias, reciba de parte de su empleador el 15 % de su ingreso para aportes a pensión; que en este caso se verá reflejado en BEPS [Beneficios Económicos Periódicos], y un ‘microseguro de riesgos laborales’. En materia de salud, estas personas serían beneficiarias del régimen subsidiario, es decir, el Estado se haría cargo de ello”, explicó el funcionario a El Espectador.

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Sin embargo, algunos representantes de los gremios y organizaciones sindicales que acudieron a la reunión de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales (CPCPSL), donde se socializó esta propuesta, no estuvieron de acuerdo con la propuesta.

Fabio Arias, de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) la calificó, citado por La República, como “una profunda, regresiva, reforma laboral” porque tratará “de pagar salarios mínimos, por debajo del mínimo, sin seguridad social, sin prestaciones”.

Sin embargo, Baena aseguró que esta propuesta beneficiará a trabajadores como el 85 % de los campesinos, que “hoy están desprotegidos” en riesgos laborales y “no hay quien los atienda”.

La otra propuesta la explicó el viceministro de Empleo y Pensiones, Andrés Felipe Uribe, con la que busca aumentar la formalidad del 36 % al 41 %. “Lo que significa, que se lograría que un millón de trabajadores mejoren la calidad de su empleo y hagan parte del mercado laboral de manera formal”, puntualizó.

Este punto, está enmarcado dentro de la segunda estrategia, que consiste en consolidar el subsistema de formación para el trabajo, para un talento humano acorde con las necesidades del sector productivo.

Para ello, se trabaja en la pertinencia de la formación que redundará en ganancias de empleabilidad y emprendimientos de mayor calidad, indicó Uribe.